Lopetegui, invicto y con variantes
El seleccionador ha utilizado diversos sistemas y sigue sin perder un partido
Después de la Eurocopa de Francia y tras el adiós de Del Bosque, se abrió un amplio debate sobre el nombre de su sucesor. Julen Lopetegui y Joaquín Caparrós, dos técnicos de un perfil totalmente distinto, optaban al banquillo de la Roja. La Federación lo tuvo claro y optó por Lopetegui, con un brillante currículum como seleccionador sub-21 y con un estilo muy parecido al que había llevado a España a lograr los mayores éxitos de su historia. Los pesos pesados del vestuario le dieron su bendición y Villar apostó por Lopetegui.
Trece meses después, Lopetegui se mantiene invicto. Entre partidos oficiales y amistosos, se ha medido a rivales de la talla de Italia, Francia e Inglaterra y puede presumir de que aún no conoce la derrota. Ha logrado victorias de prestigio, como la del Bernabéu ante Italia o la que logró en París ante Francia.
Y lo ha hecho desplegando una gran variedad de tácticas y de variantes que demuestran que es un técnico muy preparado y un ‘enfermo’ del fútbol, en el buen sentido de la expresión.
Su gran obra la logró precisamente ante Italia, cuando apostó por reunir a seis centrocampistas para sortear los problemas que le habían causado en los últimos tiempos la propia selección italiana y otras que apostaban por tres centrales. Lopetegui reunió en el once a Busquets, Iniesta, Koke, Isco, Silva y Marco Asensio y la selección jugó el mejor encuentro desde que el vasco es el seleccionador. En el partido siguiente, en Liechtenstein, optó por jugar con solo tres defensas, algo que ya había hecho en sus primeros partidos para tratar de superar a rivales a priori inferiores pero que se le resistían a España. Aunque el 4-3-3 ha sido su esquema más habitual, no es esclavo de ningún dibujo y ha quedado claro que su libreta táctica está llena de variantes, lo que hace a la selección aún más imprevisible para los rivales