Montilivi se reivindica
En la grada se vio que era un día histórico, más que solo fútbol
Mucho se esmeraron los técnicos de Girona y Real Madrid para recalcar que el de ayer solo era un partido de fútbol, sin embargo desde la grada no se pudo ocultar que se trataba de un día histórico, algo más que solo fútbol.
La visita de los blancos llenó hasta la bandera Montilivi y trasladó la Fiesta Mayor de la ciudad al estadio, creando un ambiente espectacular para un duelo todavía inédito en la Liga.
Siempre respetando el clima de deportividad y respeto que deben imperar en cualquier campo de fútbol, el júbilo en las gradas fue mayúsculo, animando al Girona a intentar conseguir la hazaña de vencer al Real Madrid.
Cuando los futbolistas merengues saltaron al campo recibieron la ovación de los muchos aficionados blancos que se congregaron ayer en Montilivi, aunque rápidamente los seguidores rojiblancos se hicieron escuchar –y de qué maneraa grito de “¡Girona! ¡Girona!” mientras desplegaban un mosaico espectacular.
Con el clima político de Catalunya, la de ayer era una jornada reivindicativa en Girona. Las esteladas y las banderas españolas se mezclaron en Montilivi con total cordialidad, aunque los gritos independentistas sonaron más que nunca cuando llegó el minuto diecisiete de juego.
Los goles de Stuani y Portu revolucionaron a un sonoro Montilivi, que vio como el Girona se vestía de gigante para superar a todo un Real Madrid. La grada creyó posible la gesta de los catalanes y sus futbolistas no fallaron, poniendo el broche de oro a las fiestas de la ciudad, un fin de semana redondo.
Cristiano Ronaldo fue el máximo exponente del ‘pinchazo’ del Real Madrid en Girona. Nada más tocar su primer balón se vio claro cuál iba a ser el blanco predilecto de los aficionados congregados en Montilivi, que se ensañaron con el ‘7’, dedicándole una sonora pitada cada vez que tocaba el balón.
El portugués sigue sin su puntería habitual en esta Liga y ayer volvió a fallar claras ocasiones para marcar. Como su equipo, no apareció cuando debía y se marchó de Girona impotente y sin haber engordado su paupérrima cuenta goleadora en la Liga. Carles Puigdemont fue una de las innumerables autoridades que felicitaron al Girona por su triunfo. “Gran victoria del Girona 2-1 al Real Madrid en Montilivi (¡el dia de Sant Narcís!). Enhorabuena, ¡Seguimos!”, dijo en twitter
CR7, pitado cada vez que tocaba el balón, fue el exponente del ‘pinchazo’ merengue