SUPERZAMORA A EUROPEO
Su paradón a Dybala le confirma como el portero más en forma de Europa y como el menos batido El meta del Barça suma cinco goles entre Liga y Champions, a 0,29 por partido, y ni De Gea se le acerca
La consagración de Marc André ter Stegen en la portería del FC Barcelona está llegando acompañada de unas cifras estratosféricas que le convierten en el portero con mejores estadísticas en toda Europa en lo que va de temporada, tanto en Liga como en Champions League. Empieza a estar en boca de muchos que el meta azulgrana está entre los mejores del mundo y el hecho de que haya encajado solo cinco goles en los 17 partidos disputados entre Liga y Champions este curso apoya con creces esta teoría.
Ter Stegen no tiene rival en el viejo continente en cuanto a cifras se refiere. Promedia 0,29 goles por partido, muy lejos de los 0,44 de David de Gea (Man.United), el segundo en la tabla. Les siguen Oblak (Atlético) con 0,53 y Areola (PSG) con 0,55, y más lejos ya, con más del doble que Ter Stegen está Ederson (Man.City) con 0,63 (Bravo le relevó puntualmente).
La supremacía de Marc André no solo se plasma en números sino que sus grandes actuaciones refuerzan esa imagen de seguridad que ofrece. Sus compañeros están tranquilos y han visto como la condición de invicto del equipo también es culpa del guardameta. Ter Stegen cumplió su partido 100 en Getafe y fue precisamente allí donde se rompió la racha de imbatibilidad, que se cerró en 450 minutos sin encajar un gol.
Reguero de milagros
La última mano milagrosa del alemán fue el pasado miércoles en Turín, cuando salvó en el descuento un tiro de Dybala para amarrar un empate que acabó valiendo el pase a octavos como primero de grupo. La de Turín no fue la única ocasión que el meta ha sido decisivo esta temporada. En Vitoria salvó un mano a mano ante Sobrino, ante el Eibar en el Camp Nou puso un guante mágico a tiro cruzado de Inui y salvó otro duelo individual ante Sergi Enrich, esta con 0-0. Otra mano salvadora fue la que sacó en Girona a tiro de Douglas Luiz. En el derbi contra el Espanyol se estiró a mano cambiada para desviar el tiro de Dídac Vilà. En el Wanda puso un pie cuando Griezmann la había cruzado y ya celebraba el gol y más tarde evitó otra diana del francés poniendo otra mano en el palo corto. La yema de sus dedos evitó un gol de Pjanic con la Juventus en el partido del Camp Nou. A estas hay que sumar dos paradas salvadoras en Bilbao ante Aduriz, que permitieron a los azulgrana salir de San Mamés con los tres puntos. Todas estas intervenciones mencionadas no son intervenciones normales, sino que son acciones que en la mayoría de los casos acaban en gol y que Ter Stegen logró salvar.
El valor de Ter Stegen bajo palos se convierte en incalculable cuando además es el primer futbolista del equipo en comenzar las jugadas de ataque con su juego de pies. Es ya habitual ver en el juego azulgrana como los defensas combinan con el meta como uno más y los pases del alemán suelen servir para superar una línea de presión, o dos, y generar una superioridad que acaba en gol. En tiempos de debates sobre el acierto a la hora de fichar es remarcable que el que podría ser actualmente el mejor portero del mundo llegase hace cuatro temporadas por 12 millones de euros