Silencio sobre la renovación y la foto
No hubo ni pistas ni referencias sobre cuándo será la firma protocolaria del nuevo contrato del argentino
Hubo foto sí, con el presidente Bartomeu, también, pero no fue por la renovación y, además, había una tercera persona entre ellos. El acto de entrega de la Bota de Oro, que cada año concede European Sports Media (ESM), aparecía como el día definitivo para que Leo aclarase todas esas dudas que tienen agarrotado al barcelonismo desde hace tiempo. Si ha rubricado ya su contrato, si la firma de su padre y de su Fundación ya sirve y por qué no se ha hecho todavía la protocolaria firma oficial con el máximo dirigente azulgrana. Aunque no deberían ser tantas, porque el Barça le dio por renovado por poderes, porque cobra su nuevo sueldo y porque no queda libre a partir del 1 de enero.
Pero tantas cuestiones no encontraron ayer respuesta en la Antigua Fábrica Damm. A diferencia de otras ocasiones, no existió turno de preguntas para los periodistas, así que todo se fió a lo que iba aconteciendo. En el minuto uno, el presentador ya había soltado que “hoy no es día para hablar de la renovación de Messi”. En los prolegómenos a la entrega del premio, la organización ya había avisado de que era muy improbable que se tratase este espinoso asunto. Lo sabía Leo y lo sabían también los dirigentes azulgrana, los vicepresidentes Jordi Mestre y Jordi Cardoner, el mánager deportivo Pep Segura, el CEO Oscar Grau, el director de relaciones institucionales Guillermo Amor, el aún director de fútbol Raül Sanllehí, Luis Suárez, Iniesta y Busquets, con aspecto informal, su padre Jorge, su hermano Rodrigo, su esposa Antonela y su hijo Thiago, siempre divertido. También Juan Ignacio Gallardo, director de Marca, y es probable que hasta el cónsul argentino también lo intuyera. Minguella, en tono jocoso, llegó a ofrecer una servilleta para acabar con el culebrón. Jorge Villavecchia, director general de Damm, y Ramón Agenjo, consejero de esta empresa, no se perdían detalle. Pero ni una pista ni un indicio, ni tan siquiera una mísera referencia. Ya todo se resumían a los gestos y a las interpretaciones. Cada cual con la suya. Breve intercambio de frases en el escenario entre Leo y Bartomeu, aunque las sonrisas fueron a la llegada al recinto.
Hubo parlamentos y se habló de otros asuntos. Uno, importantísimo. Leo quiso aprovechar la enorme repercusión y audiencia del acto para dar visibilidad a su gran proyecto personal, como es la creación de un centro puntero especializado en la lucha contra el cáncer infantil, el Pediatric Cáncer Center Barcelona. La presencia del niño Eyal Gotz, que ya ha superado la enfermedad, dio mayor emotividad.
Hubo otros detalles, como el cruce de guiños entre Suárez y Thiago y una broma sobre Hacienda en el peor escenario. “Sonreid (para la fotografía), como si Hacienda devolviese dinero todos los días”. Xavi Llorens, Roger Esteller, Jordi Arrese, Albert Costa, Tente Sánchez, Esteve Calzada, Claudi Martí Mortes también lo escucharon
El crack azulgrana estuvo rodeado de su familia y de los capitanes
Leo no olvidó hablar de su proyecto sobre el hospital infantil contra el cáncer
Thiago estuvo divertido y una broma sobre Hacienda alteró las pulsaciones