PENALTI SALVADOR
El Real ganó sufriendo al Málaga con un gol de CR7 al aprovechar el rechace de un penalti que falló Con 2-1, el árbitro anuló un gol a los andaluces por una falta muy protestada por los de Míchel
El Real Madrid hizo bueno aquello de venció pero no convenció. Esta vez fue ante el Málaga, equipo en zona de descenso, que no ha ganado lejos de La Rosaleda y que hasta ayer no sabía lo que era marcar a domicilio. Pues ni ante un equipo así, el Real Madrid fue capaz de vencer cómodamente. De hecho, lo hizo sufriendo y gracias a un penalti en el minuto 75 sobre Modric que Roberto le paró a Cristiano, pero el rechace le fue al jugador portugués que marcó el 3-2 definitivo. Un resultado que les permite a los blancos dormir a siete puntos del Barça que juega hoy.
Ese gol sirvió para aplacar a un Bernabéu que estaba pitando a los suyos harto de su apatía y de ir a remolque de un Málaga que en esos momentos creía en la victoria. Ese tanto de Cristiano calmó las aguas de una afición que se marchó con la convicción de que este año, su Real Madrid no es el de la temporada pasada. De hecho, está muy lejos del equipo que ganó Liga y Champions. Ya no es cuestión de forma física. Es cuestión de que hay algunos jugadores como Kroos o Marcelo que no están para jugar y si a eso se le añade que ayer, Isco tampoco apareció, el equipo blanco se vuelve vulgar.
Del desastre le salvó el penalti claro sobre Modric que no dudó en pitar Gil Manzano que protagonizó la jugada misteriosa de la Liga. Tiempo añadido en la primera mitad y marca el Málaga, concretamente Baysse, pero el árbitro lo anula por falta sobre Carvajal que en el campo, sinceramente, casi nadie vio. Sobre todo los del Málaga que no entendían nada. Con ese enfado se fueron al descanso de una primera mitad que el Madrid comenzó bien, con Benzema marcando el 1-0 en el minuto nueve al recoger un rechace del larguero tras cabezazo de Cristiano. Parecía que la tarde se le ponía de cara a un Madrid que mandaba en el campo con ocasiones para aumentar el marcador, pero que comenzó a dar muestras de debilidad con muchos balones perdidos. De uno de esos fallos, concretamente de Kroos , se aprovechó el Málaga para poner el 1-1, obra de Rolan, en el minuto 18. Poco le duró la alegría a los andaluces porque en el 21’, Casemiro remataba a placer un saque de esquina –cabeceó sin saltar– que significaba el 2-1. El Madrid pudo cerrar el partido antes del descanso, pero Roberto lo evitó con grandes paradas, especialmente uno a Cristiano.
Con ese 2-1 y el gol anulado al Málaga se llegó al descanso. La segunda mitad comenzó con el espejismo de un remate de Kroos. Un espejismo porque el Málaga fue muy superior a un Madrid que no estaba y que durante muchos minutos fue a remolque de los andaluces que empataron en el minuto 57 con un disparo de Chory Castro que se ‘tragó’ Casilla. Ese 2-2 fue vitamina para el Málaga que estaba convencido de que podía ganar a un Madrid que reaccionó lo justo y que pedía penalti en cualquier caída en el área visitante. Es cierto que hubo uno a Lucas que el árbitro no vio, pero que sí pitó el que le hicieron a Modric y que transformó Cristiano. Era el 3-2 en el 76’ pero el partido no estaba cerrado. El Málaga buscó de nuevo el empate, pero no lo logró y el suspiro de alivio que se escuchó en el Bernabéu tras el pitido final fue de los que hacen historia
Antes de la jugada del 3-2, el Bernabéu estaba pitando a los de Zidane