VICTORIA TRAMPA
España cumplió con un gran triunfo sobre Eslovenia pero jugará en octavos contra Noruega, favorita al oro La derrota de las vigentes campeonas contra Suecia dejó un poso agridulce tras el partidazo de Nerea (9)
Victoria trampa para las ‘Guerreras’ del balonmano: la selección española se medirá el lunes (20.30 h) a Noruega, en Leipzig, en los octavos de final del Mundial femenino de Alemania. España cerró ayer la liguilla del grupo A con un gran triunfo sobre Eslovenia (33-26), pero Suecia derrotó a las noruegas en el B (31-28) y las vigentes campeonas del mundo serán las rivales del equipo de Carlos Viver en el primer cruce.
El final de la liguilla dibujó el camino de todas las selecciones hacia el título y quedó extremadamente espinoso para el equipo español: Rusia, actual oro olímpico, o Corea del Sur sería el rival en cuartos y otras dos potencias aparecen en el horizonte de semifinales: Rumanía o Holanda.
España necesitaba ganar a Eslovenia para acabar tercera, eludir la 4ª plaza de grupo y a Noruega en octavos si se cumplía la lógica en el otro encuentro. Sin embargo, las favoritas al oro perdieron contra las suecas y acabaron segundas del grupo B. Las ‘Guerreras’ terminaron con siete puntos, los mismos que Francia: ambas selecciones empataron su encuentro (25-25), pero las galas finalizaron segundas por mejor diferencia de goles (+37 por +26) y se medirán a Hungría por la otra parte del cuadro.
Estatus reforzado
La victoria tuvo la consecuencia agridulce del emparejamiento contra Noruega, pero reforzó el estatus de la renovada selección española, metida ya en un relevo generacional prometedor en su primera cita importante.
España y Eslovenia perdieron ocho y nueve balones en la primera parte, respectivamente, terre Pena, no en el que las balcánicas se movieron mejor, sobre todo porque la zurda de Ana Gros fue un martillo pilón: seis goles en los primeros 30 minutos. Eslovenia dispuso de una renta máxima de tres goles (8-11 en el 22’), pero un tiempo muerto de Viver serenó a sus jugadoras y llegaron al descanso sólo uno abajo gracias a un tanto ‘in extremis’ de Etxeberria (13-14).
Tras las apreturas del primer período, la selección se desató en la reanudación, primero con la decisión de Ivet Musons y las paradas de Darly Zoqbi y después con nuevos zambombazos de Nerea que completó uno de sus festivales particulares perforando una y otra vez la meta rival: nueve goles al final de la central.
Con acierto ofensivo, España también se concentró más en defensa y dificultó mucho las acciones de las eslovenas, que se fueron diluyendo poco a poco al mismo ritmo que las ‘Guerreras’ subieron sus prestaciones.
En el segundo tiempo, un parcial de salida de 5-1 fue elocuente del momento dulce del equipo (1815 en el 36’). Eslovenia aún se acercó en el marcador (20-18 en el 42’), pero siempre halló la respuesta inmediata y contundente de España, normalmente con un cañonazo de Nerea, siempre pletórica. Su octava diana encarriló la victoria (2420 en el 47’), hasta el punto de que España cubrió incluso con tranquilidad los últimos diez minutos del choque.
La selección rompió definitivamente el partido con un feroz robo de balón de Carmen Martín y la ‘contra’ posterior de Lara González: con el 29-23 a falta de cinco minutos las eslovenas izaron la bandera blanca hasta el 33-26 final.
Si la victoria fue agridulce para España, la derrota resultó menos dolorosa para Eslovenia porque le emparejó con Suecia en los octavos de final. Es otro equipo de mucha entidad, pero Noruega era el ‘coco’ que todos querían evitar.
“Da igual el rival, a un partido todo puede pasar y vamos a lucharlo al máximo. Esta Noruega no es la que pasaba hace unos años por encima de todos, sino que se la puede ganar. Si nuestro equipo está bien, somos imparables”, exclamó Nerea Pena, obviamente MVP del encuentro tras su partidazo contra Eslovenia