El peor momento de Donnarumma y el Milan
ROMA - El Milan necesita más que nunca una victoria contra su rival ciudadano, el Inter, el miércoles en octavos de Coppa Italia, tras agravar su profunda crisis el sábado al perder por 0-2 en San Siro en Serie A contra el Atalanta. No sólo el equipo ahora dirigido por Gennaro Gattuso tocó fondo (es 11º en la tabla pese a una inversión en verano de 194,5 millones de euros en fichajes, la cuarta más elevada de Europa) sino también su portero estrella, Pierluigi Donnarumma, quien cometió un error en el primer gol de los de Bergamo, obra del exmilanista Bryan Cristante (entre 2011 y 2014).
Pierluigi Donnarumma oyó a lo largo del partido los pitidos de los aficionados del Milan dedicados a su persona. En plena tensión entre Mino Raiola, agente del meta, y la cúpula rojinegra, el futuro de Donnarumma está en el aire. No parece probable que se vaya en el mercado de invierno, pero en el de verano la situación puede ser distinta.
Y, cuando por megafonía antes del inicio del partido sonó el nombre del hermano mayor de Pierluigi Donnarumma, Antonio, fichado en verano en calidad de cancerbero suplente como una de las condiciones para la renovación de Gigio, también hubo una fuerte pitada de los hinchas del Milan hacia el guardameta reserva. La situación es cada vez complicada y Gattuso dijo que no dimite