La selección, rumbo a Rusia
La Roja jugará su undécimo Mundial consecutivo. Arrasó en la fase de clasificación, en la que Italia naufragó, quedando fuera
El 6 de octubre, la victoria ante Albania (3-0) en Alicante y el empate de Italia contra Macedonia en Turín (1-1) clasificó de forma directa a la selección española de fútbol al Mundial de Rusia 2018. Faltaba por disputarse el partido de la última jornada, en Israel (0-1), y la Roja ya había sellado su billete. Los de Julen Lopetegui culminaban así el objetivo en una fase de clasificación en la que el encuentro ante Italia, un mes antes en el Santiago Bernabéu, había desequilibrado el grupo. Aquel 3-0 dio a la selección un liderato en solitario que ya no soltaría. Ni el ambiente enrarecido por los pitos de parte de la afición a Piqué descentró a una Roja que acabó invicta en su camino (nueve victorias y un empate).
De no haber lesiones, el seleccionador parece tener bastante claro el bloque de 23 jugadores (34 utilizó durante la clasificación) que se llevará a la gran cita, con un ‘once’, a priori, bien definido: De Gea; Carvajal, Piqué, Sergio Ramos, Jordi Alba; Koke, Busquets, Iniesta; Silva, Morata e Isco.
Arrivederci Italia
España cumplirá 40 años sin perderse un Mundial (once campeonatos consecutivos), lo que enfatiza su peso entre la élite. Desde 1978, solo Brasil, Alemania y Argentina no han fallado jamás. Por contra, otra de las históricas, Italia, no estará en Rusia. Por primera vez en 60 años, desde 1958, se quedó fuera. Finalizó segunda en el grupo de España y en la repesca, ante Suecia, perdió en Solna (1-0) y no pudo pasar del 0-0 en la vuelta, en Milán. Fracaso estrepitoso y triste adiós a la ‘azzurra’ del portero Buffon, que podía haber disputado su sexta Copa del Mundo a los 40 años