La Rosaleda, oasis ‘perico’
El Espanyol sigue sacando petróleo de sus visitas a Málaga
El Espanyol mantiene un particular idilio con La Rosaleda. El estadio del Málaga es un bálsamo para el equipo catalán, pues es allí donde lame sus heridas. En las seis últimas visitas, cinco victorias y un empate. Al igual que la pasada temporada, en la que ganó 0-1 con un gol de Piatti, ayer repitió con uno de Sergi Darder, precisamente un exjugador del Málaga.
El partido de anoche no pasará a la historia. En todo caso puede que sea recordado por Míchel, a quien, no habría que descartar, que los Reyes Magos, antes de llegar a Oriente, le puedan hacer una visita express para dejarle carbón en forma de destitución. Su equipo, tras 18 jornadas disputadas, sigue hundido en la clasificación, sumando solo once puntos, a cuatro de la permanencia. Si la salvación se cifra en unos 4041, necesitará 30 de los 60 que quedan por dirimirse. Vaya, que tendría que ir casi a ‘ritmo de Champions’.
Los 12.149 ‘valientes’ que fueron a La Rosaleda, en la que fue la peor entrada que se registra en partido de Liga en los doce últimos años, silbaron a los suyos, aunque también podrían haber dirigido su descontento hacia un Espanyol que pasó de puntillas. No en vano se presentaba como el segundo peor conjunto a domicilio de la competición, solo superado por el propio Málaga. Y que Roberto y Pau López sean los porteros que más paradas llevan hechas en la Liga habla por sí mismo de cómo están ambos equipos.
Los tres puntos sumados fueron la única lectura posi- tiva para los de Sánchez Flores, que, eso sí, ahora tendrán que vérselas en la próxima jornada ante el Athletic sin Da- vid López ni Javi Fuego, que serán sancionados tras ver la tarjeta amarilla, y posiblemente sin Víc- tor Sánchez, que cayó lesionado
Quique pierde ante el Athletic a Javi Fuego y David López y, quizás, a Víctor Sánchez