El Peralada se consolida en la zona tranquila de la tabla
Chicho, el técnico del 2018: “No esperábamos que los resultados fueran tan buenos”
Una derrota en las últimas 12 jornadas, con seis triunfos incluidos, y siete puntos de margen con el descenso son los números más visibles que demuestran la transformación del Peralada-Girona B en la segunda vuelta de Segunda B, categoría que estrena. Coincidiendo con la entrada de Narcís Pèlach ‘Chicho’, el sustituto de Arnau Sala, que se fue a la segunda división de China con Raül Agné, el equipo ampurdanés ha dejado el descenso para volar hasta la undécima plaza. “No esperábamos que los resultados fueran tan buenos, pero desde el principio tenía la confianza máxima y la conexión con los jugadores era muy buena”, recuerda Chicho, que con 29 años y una experiencia de una temporada y media en el Figueres, de Tercera, cogió las riendas del filial del Girona, su club de formación.
Además de su llegada, el Peralada reforzó la plantilla con tres piezas fundamentales que se han asentado a la titularidad: el portero Marc Vito, que lleva cuatro partidos y medio sin encajar; el central Santi Bueno y el delantero Manel Martínez. Los tres han entendido a la perfección el 3-4-2-1 y el 4-4-2, sistemas de juego preferidos por Chicho. “Jugamos igual que el primer equipo, cuando defendemos es un 5-4-1, pero hemos utilizado más el 4-4-2”.
Acaba contrato a final de curso
Cuando solo quedan siete partidos, el Peralada, igual que los rivales, hace cuentas de los puntos que le faltan para salvarse: “Los cálculos es- tán puestos en los 46 puntos, necesi- tamos dos victorias”, augura el entrenador gerundense. Su contra- to expira a final de esta temporada, pero todo apunta que seguirá: “Mi deseo es salvar la categoría, tengo los cinco sentidos puestos aquí y no pienso en más allá”