Pep: Máxima prioridad
La derrota del City convirtió a Guardiola en la estrella principal de los informativos
Jornada de Champions con resaca de chilena del día anterior. Solo el Telediario y los deportes de Informativos Telecinco abrieron con el habitual criterio de proximidad de informar primero sobre los clubes autóctonos. Para el resto, daba igual que el Barça ganara a la Roma por 4 a 1. La prioridad deportiva televisada en España era el Manchester City. O mejor dicho: Pep Guardiola. Lo importante era, a juzgar por el enfoque informativo de las noticias, el fracaso personal de Pep y no tanto la derrota de su equipo. Pedrerol abría Jugones con energía renovada: “Te dan lo que pides, te gastas 500 millones de euros en dos años, te humilla el Liverpool y te quejas del árbitro. A eso se le llama… ¡llooraaar!” y, a continuación dedicaban 8 minutos y 15 segundos a hablar del ataque al autocar del City y la derrota de Guardiola. “Atacado y humillado” decía el rótulo como síntesis. Después abordaron los asuntos del Camp Nou. Primero, priorizaron el asunto político de los globos y la reivindicación independentista, por supuesto. Y ya en tercer lugar (y menos importante), cuatro minutos y medio más para hablar del partido del Barça. En Antena3 abrieron con los globos indepes. “Tiñeron el césped de amarillo” afirmaba el titular, lo que da una idea de cuál es su rigor habitual. Cuatro minutos para los globos y pancartas y unos irrisorios veinte segundos para el partido del Barça. Y después ya sí: Dos minutos para Pep, su fracaso e incluso la insignia en el pecho. “Lazos y piedras” titulaban. En Cuatro empezaron por los ataques al autocar del City. La espectacularidad de unas imá- genes cargadas de violencia es otro elemento que se antepone a los aspectos puramente deportivos. En ‘El golazo de Gol’ hasta preguntaban a los colaboradores, con rótulo incluido, “¿Guardiola ya no mea colonia?”. Su derrota ante el Liverpool también fue analizada antes que la victoria del Barça.
Está claro que las derrotas de Pep tienen en España más prioridad que sus éxitos. Que si llora, que si mea colonia, que si mira el lazo, que uy lo que dice… Si pierde se convierte en una alarmante afrenta personal y si gana es solo fútbol internacional