Ganar la Premier y pensar en la gesta
El City puede levantar el título en el derbi ante el United aunque Guardiola tiene un ojo puesto en la vuelta de Champions frente al Liverpool
Nunca antes un derbi de Manchester tuvo tanta recompensa para el City como este, a las puertas de alzar la Premier si gana al United en el Etihad. Mourinho se cruza en el camino de Guardiola en un momento crítico para el técnico catalán, al borde del abismo en Champions, obligado a un milagro la semana que viene frente al Liverpool. Tras el batacazo en Anfield, el escenario del derbi es distinto. Si antes era el United el que cargaba con la presión, ahora es el cuadro de Pep el que llega con urgencias a la cita, al menos con el propósito de levantar el ánimo.
La trascendencia del derbi va más allá del resultado para el City, que si no canta el alirón ante el United lo hará ante el Tottenham la próxima semana. O a la siguiente. Nadie puede arrebatarle la Premier a estas alturas, pero el choque ante su rival ciudadano tiene una incidencia psicológica: “Lo que pase en el derbi influirá en el martes”, en alusión al intento de remonte frente al Liverpool.
No les gusta a los entrenadores hablar del medio plazo. Tampoco a Pep, que piensa en el United aunque reconoció ayer que, pase lo que pase esta tarde, tendrá un ojo puesto en el encuentro europeo: “Tanto si ganamos la Premier como si no, cuando acabe el partido empezaremos a preparar la vuelta de los cuartos de final de la Champions”, aseguró el catalán, que no ofreció pistas sobre su esquema, tampoco sobre el posible regreso de Agüero, ni siquiera si hará algunas rotaciones. El City necesita reaccionar, y nada mejor que ganar al United para obtener la licencia de soñar con una gesta ante el cuadro de Klopp.
Mou, experto en aguar la fiesta
Con monosílabos, en su versión menos afable, Mourinho pasó de puntillas sobre su análisis del derbi: “El objetivo es ser segundos”, se limitó a comentar el portugués. Escaso aliciente para un club como el de Old Trafford, realista al mismo tiempo. A dieciséis puntos de la cabeza, toca asegurar la plaza y empezar a trabajar con vistas a una próxima temporada en la que, según Guardiola, su City no disfrutará de una ventaja tan holgada: “Es imposible porque los rivales nos tendrán más ganas y el éxito te relaja”, si bien es cierto que tratará de evitar a toda costa que eso suceda.
De cara al derbi de esta tarde, no hay nadie mejor que Mourinho para torpedear el camino del City y postergar su celebración en la Premier. Experto en contrarrestar las virtudes de su oponente, el preparador del United ya evitó en 2014, desde el banquillo del Chelsea, que el Liverpool se hiciera con el título tras ganarle en Anfield. Ahora no podrá evitar el triunfo final del City, pero asaltar el Etihad se convertiría en un título simbólico