Rahm superstar en su vuelta a España
El vasco, que habló del Masters, sus opciones de nº1 a principio de año, su carrera en la Blume y luego en EE.UU., es la atracción del Open
Es la gran atracción del Open de España en el Centro Nacional de Golf que comienza hoy. Y como tal acaparó la atención de muchísimos medios de comunicación, ávidos de sus respuestas, recién llegado como está del Masters de Augusta. Es Jon Rahm, quien ha querido apoyar con su presencia el centenario torneo en su regreso al circuito europeo, tras un año de ausencia por falta de patrocinio.
Jon estudió en la Blume, y hace seis años se fue a EE.UU., a la universidad de Arizona State. “Llegué a Estados Unidos con 17 años, aprendí inglés y me formé como jugador. Ojalá que mi tercera victoria en Europa sea en España. Es todo un honor ser uno más en este torneo. Yo he venido aquí a jugar bien, no de vacaciones y este torneo me lo tomo muy en serio. He sido campeón de España desde cadete a absoluto, por lo que me encantaría cerrar el círculo con el Open profesional de mi país. Es un orgullo estar aquí”. Vamos, compromiso total del nº4 mundial con el Open de España.
Para Jon no supone ninguna presión ser el gancho principal para que el golf gane más apoyo, seguidores y jugadores en España. “No significa llevar un peso encima, es motivación. Siempre he dicho que me daría por satisfecho si contribuyo con un porcentaje pequeño de lo que hizo en su día Seve”.
Con evidente jet lag aterrizó el lunes en Madrid procedente de Augusta, donde finalizó cuarto en el Masters, su mejor resultado en un Grand Slam. En broma dijo que “sólo me faltaron cuatro golpes para ganar”, en serio afirmó que “la tarjeta del primer día, esos 75 golpes y tener que recuperar tanto, eso es lo que me faltó, pero el principal objetivo, que era darme la oportunidad de estar con opciones de victoria en los últimos nueve hoyos el domingo se cumplió”. Preguntado por cómo vivió las horas previas a la última jornada fue sincero: “cené y dormí bien. Como no iba líder y tenía seis golpes de desventaja, la tensión no iba conmigo”. Al preguntarle si notó presión extra con la posibilidad a principio de año de ser nº1 aseguró que “me pilló por sorpresa, esa semana no estaba jugando bien y no es fácil ganar en el PGA Tour, noté presión al principio pero al final entrenamos y competimos para esto. Ojalá tenga otra opción de ser nº1”.
Por último, volvió a hablar maravillas de su experiencia universitaria americana. “Para ir a estudiar a América necesitas sacar buenas notas aquí. Y yo sacrifiqué jugar el Open de España en mi último año de la Blume para sacar buenas notas. Y ahora lo agradezco. Podía haberme hecho profesional en mi segundo año de carrera, pero decidí graduarme para crecer más como persona. Es algo que nunca viene nada mal. Hay marcas en EE.UU. que descartan fichar a jugadores sin carrera universitaria por muy buenos que sean. Estados Unidos es el mejor país para estudiar y jugar al golf. Hay facilidades, medios, mentores, profesores, entrenadores, el que no lo pruebe es porque no quiere. La opción está ahí“