Un Atlético de Champions
El equipo rojiblanco se impuso con comodidad al Levante y por sexta temporada consecutiva se clasificó para disputar la Liga de Campeones
El Atlético de Madrid se presentó ante el Levante, como en tantas ocasiones en estos últimos tiempos, con lo puesto. Un día festivo, de reivindicación rojiblanca para las generaciones futuras y en el que los de Simeone sacaron el partido a delante sin demasiados problemas (3-0).
El Atlético ofreció esa imagen de martillo pilón que deja en algunas ocasiones, esa con algo de margen a los fuegos de artificio pero con lo suficiente como para que el que fuese se marchase contento por el triunfo, que al fin y al acabo es de lo que va esto. Y con estos tres puntos se aseguró matemáticamente la Champions por sexta temporada consecutiva, a falta de seis jornadas para el final del curso. Se dice pronto y fácil pero no es sino la constatación de que la irrupción del Cholo es lo mejor que le ha pasado a este equipo en las últimas décadas. En España sólo lo pueden decir el Real Madrid y el FC Barcelona. Una victoria que, paralelamente, le vale para conservar la segunda plaza y la misma distancia respecto al líder Barca (once puntos).
Determinante Correa
En una primera parte poco lucida, el equipo colchonero se adelantó en una jugada puntual, en una buena combinación entre Vitolo y Ángel Correa. El argentino tiró de sus raices, gambeteó, amagó para buscarse espacio en el centro del área y cruzar el balón por debajo de las piernas de un defensor, imposible para Oier.
‘Angelito’ fue de lo más potable en la primera mitad. Antes de dar con la tecla ya lo había intentado en otra buena acción en la que un jugador visitante había evitado que el balón enfilase la portería levantinista.
La jugada más polémica de la primera mitad fue una escapada de Griezmann al área rival. El francés se marchó como una auténtico cohete pero al llegar al área se adelantó demasiado el balón, de tal forma que no pudo disparar sino intentar driblar a Oier. El meta le tocó, pero para Gil Manzano no fue penalti y, además, amonestó al galo por entender que se había tirado. Alguno comentó con sorna en la grada que de ser en el minuto 93 en el Santiago Bernabéu y en la Champions quizás sí que habría sido decretado. Indemostrable en cualquier caso, claro, pero ya saben, es que la hinchada rojiblanca estaba por la fiesta y el chascarrillo.
Dos golazos
Por si había pocas dudas de quién era el partido del Metropolitano, el equipo colchonero puso más tierra de por medio nada más comenzar la segunda mitad. Una jugada como las mil que ha ensayado el equipo rojiblanco, la que mejor se le da. Una apertura a la banda para que el lateral, en este caso Vrsaljko, apareciera y de primeras, sin tener que controlar, la pusiese en el corazón del área. Allí esperaba Griezmann quien, con su pierna derecha, sacó un misil a la escuadra de Oier.
Traca final
El Atlético siguió percutiendo. Simeone dio entrada a Gabi y Fernando Torres por Koke y Griezmann tras el esfuerzo de ambos en Lisboa entre semana. Tras el anuncio del ‘Niño’ de que no seguirá en el club el curso que viene, pueden imaginar que el Wanda se vino abajo con su entrada.
El Levante lo intentó en la segunda parte, como un disparo de Campaña, pero se encontró siempre con algún rojiblanco que se interponía en su propósito. Por su parte, el equipo rojiblanco tuvo alguna más. Vitolo la cruzó y rozó el palo. Y para el delirio de la grada, el equipo colchonero se marcó otro jugadón en el que Correa la puso en el área para que Torres marcase un golazo de volea como pocos. Golazo. El estadio se volvió loco. 3-0. Partido finiquitado y el Atlético, otra vez de Champions
Un gran Correa, Griezmann, que falló un penalti, y Torres, firmaron la victoria local