En caída libre al perder contra el Eibar
La afición blanquiazul, harta de la decepcionante temporada, despidió al equipo y Sánchez Flores con los gritos de “¡Quique vete ya!”
Con pitos y gritos de “¡Quique vete ya!” despidió la afición a los jugadores del Espanyol y al técnico Sánchez Flores. El Espanyol está en caída libre. Volvió a perder un nuevo partido y se queda a nueve puntos del descenso con cinco partidos para acabar la Liga. El Eibar, sin hacer nada de otro mundo, ganó con todo merecimiento por 0-1. Rotos y bloqueados. Así estaban los jugadores pericos durante todo el encuentro. No pueden más. Se necesita un giro de 180º para que no pasen apuros en esta recta final.
Un equipo que ha sido capaz de vencer a Barça, Madrid y Atlético es ‘barrido’ por los rivales de igual o inferior categoría. Llevan cinco encuentros sin ganar, la debilidad defensiva es total pero la ofensiva es brutal. Los pericos llevan 468 minutos sin marcar, batiendo la peor racha de 440’ con Pochettino,
Tres cambios dispuso Quique Sánchez Flores en el once contra el Eibar respecto al que perdió ante el Getafe en la anterior jornada. E l técnico relevó a los dos laterales Marc Navarro y Dídac, por Javi López y Aarón, respectivamente. Éste último había perdido su titularidad como lateral izquierdo en los dos últimos compromisos. La tercera cara nueva fue Víctor Sánchez por Jurado. El segundo capitán hizo dupla con Carlos Sánchez en el doble pivote, Darder y Piatti, por las bandas; y Gerard y Baptistao, la pareja ofensiva. Es decir, jugó con un 4-4-2, teniendo en cuenta que el Eibar, plaga de bajas, jugó con un 4-4-2. El experico Joan Jordán regresó por primera vez a Cornellà-El Prat desde su marcha.
Nervioso. Muy nervioso salió el Espanyol en la primera parte. A los jugadores de QSF parecían atenazados por la responsabilidad y obligación de tener que ganar sí o sí a un Eibar que llegaba a Cornellà-El Prat en su peor momento: seis encuentros sin ganar. Los pericos se mostraban voluntariosos pero eso no era suficiente para encarar un choque con garantías. Los armeros avisaron con algún disparo de peligro a los blanquiazules. Jugaban sin presión y se permitían el lujo de llegar a la portería de Pau cuando querían. El aviso se convirtió en gol en el 32’. Pedro León sacó un córner y Lombán, de cabeza, marcó el primer gol al avanzarse a Hermoso en el salto. El 0-1 provocó el enfado de los seguidores pericos que silbaron a los suyos y al técnico. Mientras los de Mendilibar se movían como querían, los de Sánchez Flores no se acercaron ni una sola vez a la meta defendida por Dmitrovic. Con el resultado en contra de los locales, se llegó al descanso.
La segunda parte empezó con un movimiento en el banquillo catalán: Sergio García entró por Piatti. El Espanyol se estiró un poco más, dominando en varias fases a un Eibar que se conformaba con el resultado. Un chut ajustado al palo de Víctor Sánchez y un cabezazo de Gerard fueron las primeras notas de peligro del encuentro por parte de los de Quique. En el 66’, el técnico blanquiazul hizo el segundo cambio: Melendo sustituyó a Víctor Sánchez. Los pericos empezaron a despertar del letargo y se volcaron sobre la meta armera. Gerard y un gran disparo de Sergio García pudieron equilibrar el marcador pero la suerte no estuvo con ellos. Y en el 78’, Marc Navarro salió por Baptistao. Pero el partido volvió a torcerse para los de Sánchez Flores, el Eibar se vino arriba ante la inoperancia del adversario y, de nuevo, dispusieron de ocasiones que volvieron a poner en jaque a los locales. Los tres puntos fueron para ellos