CAMBIO DE CHIP
Tras su periplo triunfal en Spa, Alonso se pone el mono de trabajo y afronta la realidad en Montmeló Ha subido siete veces al podio en 16 apariciones, con dos triunfos en el Circuit de Catalunya (2006 y 2013)
Fernando Alonso vuelve a la cruda realidad. Tras su periplo triunfal en Spa, al piloto asturiano le toca volverse a poner el mono de McLaren y preparar la próxima cita del Mundial de F1. De esta manera, el Circuit de Catalunya en Montmeló y el GP de España esperan a un Alonso que, previsiblemente, llegará con la moral alta tras proclamarse vencedor de las Seis Horas de Spa.
La de Alonso y Montmeló es una historia que viene de lejos. El ovetense ha vivido todo tipo de situaciones, posiciones y éxitos sobre el asfalto catalán, además de alguna que otra frustración. Una relación siempre especial la del piloto con este circuito, donde rodó por primera vez en 2001 con Minardi. Desde aquel precoz e inexperto piloto han pasado 16 años, y tanto Alonso como los aficionados a este deporte siguen recordando esa fecha. El asturiano terminó en decimotercera posición su primera aparición en suelo español.
Los años venideros fueron muy fértiles para un Alonso que ya brillaba en Renault. Dos segundos puestos y un cuarto entre medias precedieron la primera victoria del asturiano en Montmeló. En 2006 el piloto español subió por primera vez a lo más alto del podio del circuito catalán. En su breve estancia (2007) en McLaren-Mercedes consiguió un tercer puesto, y en los dos siguientes años tras volver a la ‘escudería del rombo’ un meritorio quinto lugar contrastó con una retirada el año antes.
Con Ferrari, en cambio, fue con la escudería con la que volvió a tocar el cielo de Catalunya. También es cierto que tuvo que esperar tres ediciones para salir victorioso en el GP de España con la Scuderia, pero tras un quinto y dos segundos puestos Alonso volvía a saborear las mieles de la victoria en su país. Esta edición (2013) en la que ganó, sería la última en pisar un podio español, ya que en su siguiente y último año con Ferrari se despidió con un 6º.
La época más frustrante del asturiano tras volver a McLaren en 2015 también se trasladó al asfalto de Montmeló. Y es que sendas retiradas en los dos primeros años tras su vuelta (2015 y 2016) dieron paso a un 12º en 2017.
Más allá de los resultados recopilados, el vínculo del piloto español con el circuito en el que participará este fin de semana se creó a través del recuerdo. Un recuerdo de victoria, para ser más exactos. Porque Alonso no logra una en la F1 desde aquella del 2013 anteriormente mencionada. La última vez que el ovetense se subía a lo más alto fue, por lo tanto, el 12 de mayo de hace cinco años. Una sensación que hace mucho que no experimenta Fernando en la F1, y que peleará por volverla a sentir este fin de semana en Montmeló, el lugar de su último baño de champán.
Veremos como discurre la carrera este año, en el que las sensaciones son diferentes. Un Alonso en alza llegará con ganas de demostrar de lo que es capaz delante de su público y de recordar aquellos años de 2006 y 2013. Aquellos maravillosos años