Coutinho abre una nueva vía
El único jugador del Barça, Messi al margen, que marca goles (3) con disparos desde fuera del área
Chutar desde fuera del área no es un recurso habitual en el Barça. Muy pocos jugadores se atreven a desenfundar. Messi es quien lo ha intentado más veces este temporada y Rakitic, en ocasiones. El resto apenas lo prueba. Luis Suárez poco y Dembélé esporádicamente. La llegada de Coutinho ha abierto un camino inexplorado y le está saliendo bien. Frente al Levante contribuyó al intento de remontada con dos goles desde lejos, el tercero desde que aterrizó en el Camp Nou. En el club están encantados con su aportación.
Coutinho no suele dudar. Si ve opciones de disparar de lejos, no se lo piensa. Lo hizo en su debut ante el Espanyol en la Copa. Dos partidos después, precisamente ante los blanquiazules pero en Liga, envió un potentísimo trallazo al larguero. No desfalleció y aunque intentó aclimatarse al juego de pase y toque del Barça, siguió con la idea de un gol desde lejos. Lo consiguió frente al Girona en el 6-1 del Estadi. Los otros dos han llegado en esta última jornada. Nadie de la plantilla se ha estrenado en este apartado. Coutinho, incluso, empata con Messi. El argentino lleva 10 goles desde lejos, aunque 7 de ellos son de falta directa.
En su Liga casi perfecta, el Barça ha marcado 11 goles desde fuera del área, seis de ellos de falta directa. Es junto a Getafe y Valencia, los que más. Uno por encima del Real Madrid, aunque en su caso más repartido. Kroos (3), Asensio (3), Bale (2), Modric e Isco. A Coutinho le ha bastado menos de media Liga para igualar los registros madridistas. Por delante solo tiene a Bardhi, del Levante, con cinco, otro especialista, al igual que Rodrigo (3), del Valencia.
Valverde valora la aportación del internacional brasileño, sobre todo en momento en el que el Barça se atasca y no encuentra vías para penetrar en las áreas rivales. Tener osadía, técnica y sabiduría para escoger el mejor momento no está al alcance de todos. El ‘Txingurri’ le anima para que siga tentando a la suerte. Lo que funciona debe repetirse