‘Historias de la puta mili’, según la versión del recluta Thiem
“No soy un gran defensor del servicio militar, fue un incordio”, recuerda el austríaco
Dos semanas de torneo de Grand Slam dan para mucho. A veces emergen historias o temas sorprendentes en el momento más inesperado. Sucedió con el austríaco Dominic Thiem. Recién clasificado para su primera final de Roland Garros y Grand Slam, con el enfrentamiento contra Rafa Nadal en el horizonte, de repente en la sala de conferencias de prensa alguien se interesó por su reciente pasado como recluta en el ejército de su país, que dividió en dos partes, la última en la última pretemporada .
Thiem no tuvo ningún reparo, y así lo mostró explayándose en reproducir su propia versión de ‘Historias de la puta mili’. El recluta ‘Domi’, como le llaman en la intimidad, subrayó que “fue un total incordio pasar allí tres, cuatro semanas. Es lo que puedo decir. No me ayudó para comenzar la temporada en 2015. Estoy feliz que por fin lo acabé”, Y se puso a reír.
“No soy partidario del servicio militar”, comentó tajante, aunque pudo haber sido peor ya que se benefició de las facilidades reservadas a los deportistas de élite. “Debo decir que tuve un tratamiento especial por ser atleta. Sólo cumplí cuatro semanas y el resto hace seis meses. Aunque no me fue de ayuda para encarar la temporada de tenis. En general, no me gustó la experiencia”. Nada que hacer, “en Austria es obligatorio”.
Una anécdota más en las peripe- cias de Thiem, que tuvo que negar hace un año, en este mismo esce- nario parisino, que hubiera parti- cipado en un entrenamiento idén- tico al que realizan las tropas de élite de los ejércitos. Lo lanzó un ex preparador físico apoyándose en fotografías, a las que quitó tras- cendencia el tenista: “Fueron un par de días y como una simple acampada”