Rusia deja al Egipto de un mermado Salah casi fuera
La anfitriona, virtualmente en octavos tras su triunfo y Cheryshev alcanzó a Cristiano
Rusia, anfitriona del Mundial, está virtualmente en octavos tras vencer (3-1) a un Egipto con Mohamed Salad, que volvió a jugar por primera vez desde de la final de Champions, en la que se lesionó el hombro en el lance con Sergio Ramos. Pese a estar mermado físicamente, Salah fue objeto de un penalti (concedido tras consulta con el VAR) que él mismo transformó y tuvo dos ocasiones más. Si Rusia acaricia la siguente ronda, Egipto estará eliminada si Uruguay gana o empata hoy contra Arabia Saudí.
Rusia llegaba rodeada de desánimo a su Mundial debido a los malos resultados en sus amistosos, pero su afición ha recuperado el optimismo tras sus triunfos contra Arabia Saudí (5-0) y Egipto. Ante un rival en el que a Salah, con Zirkhov de sombra, le costó entrar en juego en un amargo debut mundialista, la selección de Stanislav Cherchesov ya dominó en la primera parte, pero sin pegada para definir.
Salah tuvo la mejor oportunidad de Egipto en la primera mitad: tras controlar el balón y girar sobre sí mismo, el chut del astro del Liverpool salió ligeramente desviado.
Se llegó al descanso sin goles. Rusia salió después a resolver y en el 47’ se adelantó gracias a un autogol de Ahmed Fathi. El segundo lo marcó tras una gran jugada colectiva Denis Cheryshev, que igualó a Cristiano Ronaldo como máximo realizador del torneo, ambos con 3 tantos. Artem Dzyuba logró el tercero de Rusia tras una muy buena maniobra. Un gran gol del jugador al que Roberto Mancini (hoy seleccionador de Italia) no quiso en el Zenit y le cedió al modesto Arsenal Tula.
Penalti tras consultar con el VAR
Salah, quien hizo lo que pudo pero está a un 30 o 40 por ciento físicamente de su mejor nivel, fue objeto de un penalti (que el colegiado concedió tras consultar con el VAR) y lo transformó (su primer gol en su primer partido en un Mundial) para al menos maquillar el resultado.
La alegría de Rusia, que está disfrutando de su torneo y que se jugará la primera plaza del grupo A con Uruguay el lunes 25 si la celeste no falla hoy contra Arabia Saudí, contrastó con la decepción de Salah y de Egipto, que lleva dos derrotas en su vuelta al Mundial 28 años después