Suiza acaricia los octavos con un gran gol de Shaqiri en el 90’
Serbia, que dilapidó un 1-0, se la jugará con Brasil
Suiza remontó ayer a Serbia en el minuto 90 merced a un gol de Xherdan Shaqiri, elegido el MVP del partido por la FIFA, y acaricia los octavos de final del Mundial de Rusia. Los helvéticos, ayudados también por otro golazo de Xhaka, lograrán su objetivo si ganan en su próximo duelo a la ya eliminada Costa Rica. El combinado balcánico, que se adelantó por medio de Mitrovic nada más iniciarse el encuentro, pasó de estar clasificado a tener que jugársela ahora en la última jornada de este Grupo E contra Brasil.
Serbia empezó fuerte y Mitrovic avisó a Suiza con un testarazo al que respondió Sommer con una gran intervención. Apenas medio minuto después, en el 5’, el propio ariete balcánico sí que no falló al aprovechar un centro de Tadic en el que conectó un nuevo remate de cabeza tras ganarle en el salto a Schär. La ordenada defensa serbia apenas dejó espacios para atacar a Suiza, que mostró escasa movilidad . Los de Mladen Krstajic, en cambio, imprimieron mucha velocidad a sus acciones.
En el minuto 30 llegó la primera ocasión helvética en un remate de Dzemaili desviado por Stojkovic. Fue entonces cuando Shaqiri se echó al equipo a la espalda, aunque Serbia pudo irse al descanso con un 2-0, pero Tosic le pegó fatal al balón.
En la reanudación, Suiza salió
decidida a empatar y lo hizo con un zurdazo desde fuera del área de Xhaka. Con los helvéticos lanzados, Shaqiri estrelló un balón en la cruceta en el 58’. En pleno toma y daca, Gavranovic desaprovechó una gran ocasión para adelantar a Suiza, aunque la jugada quedó invalidada por fuera de juego, y tampoco acertó con otra buena oportunidad en los minutos finales del choque.
Celebración ‘a lo Cristiano’
Sin embargo, de las botas de Gavranovic nació el pase que recogió Shaqiri y que culminó en el 1-2 final tras un veloz contragolpe, en el que le superó por piernas a Tosic, para terminar definiendo con maestría ante Sommer. El crack del Stoke City lo celebró ‘a lo Cristiano’, quitándose la camiseta y mostrando abdominales. Un gran tanto que desató la locura en las filas helvéticas