Sorpresón de Corea, que echa a Alemania
Fracaso histórico y bochornoso de Alemania, que se despide del Mundial a las primeras de cambio tras caer ayer ante Corea por 2-0. La vigente campeona del mundo vivió su jornada más cruel y dantesca en toda su historia al decir adiós al Mundial. Y se repite así la maldición del campeón, pues como España en 2014 o Italia en 2010, Alemania se va en la primera fase tras llegar a Rusia como uno de las favoritas.
Es más, Alemania, hasta ayer, nunca había caído en un Mundial en una fase de grupos, pues nos debemos remontar a 1938 cuando quedó eliminada en una fase de eliminatoria, nunca de grupos.
Vergonzoso adiós de Alemania pues se fue perdiendo y ante la cenicienta del grupo, una Corea que se impuso por 2-0, un triunfo histórico para los asiáticos. Se va como cuarta del grupo, clasificándose Suecia y México. Varapalo histórico.
Corea empezó apretando, cons- ciente de que cuando Alemania se hiciera con el mando ya no lo soltaría. Y así fue, pues el conjunto germano, poco a poco, pasó a dominar el duelo, aunque las mejores ocasiones de la primera parte fueron coreanas. En el 14’, primer aviso alemán. Pase de la muerte de Reus a Werner, que abortó in extremis un zaguero coreano cuando ya se cantaba el gol. Pero pese al dominio territorial de los de Löw, el once asiático no le perdió la cara al duelo y tuvo dos ocasiones claras.
En el 19’ , Neuer casi se come el balón a chut de falta de Jung. El meta no supo blocar el esférico y la hinchada alemana rozó el infarto, recordando que Ter Stegen estaba en el banquillo. Yen el 24’, nuevo aviso de Corea. Son envió un disparo alto, marrando una clara ocasión. Alemania jugaba con fuego pues pese a mandar, no generaba peligro real.
En la recta final antes del descanso, Werner (38’) y Hummels (39’) tuvieron chance pero el portero coreano estuvo siempre muy sólido.
En la segunda parte, Alemania salió dispuesta a sentenciar. En el 48’, brutal cabezazo de Goretzka y paradón del portero coreano, estelar los 90 minutos. Y en el 51’, otra clara de Alemania, pero el disparo de Werner salió alto.
Los germanos se desesperaban a medida que pasaban los minutos, conociendo que Suecia estaba goleando y que quedaba fuera del Mundial. Los de Löw se volcaron al ataque, con más corazón que cabeza pero les faltó criterio en la medular, puntería y saber matar en los últimos metros, sin olvidar que el portero coreano era una muralla.
En la recta final, acoso y derribo de los alemanes, con ocasiones de Kross (69’) y sobre todo, de Reus (71’, 83’ y 87’), pero Alemania no logró batir al meta coreano, un bastión.
Y ya en el descuento, mazazo brutal para los germanos. Gol de Corea, gol de Kim, una jugada que pese a la revisión del VAR, subió al marcador pues no dieron el fuera de juego. Alemania se hundió. Y faltaba la puntilla. En el 97’, sentencia. A la contra, Son puso el 0-2, culminando una gesta histórica para Corea: ganar a Alemania y enviarla a casa