Fichajes rentables
EL FICHAJE DE PAULINHO fue cuestionado. Se criticó que si era mayor a los 29 años, si se pagaba demasiado dinero, unos 40 millones, si jugaba en China en una Liga poco competitiva. Era titular con Brasil, pero no pareció ser lo importante en un Barça con el entorno excitado. Con Paulinho, el FC Barcelona ha ganado el doblete y el único partido más gordo que no jugó fue contra la Roma. Se le fichó para estos encuentros, pero ese día no fue titular. No jugó ni un minuto.
EL BRASILEÑO SE VA porque la oferta china es muy buena, vuelve a un sitio conocido donde era estrella y no tiene competencia y ganará más dinero con su ficha. El Barça ingresará 50 millones por su traspaso, diez más de lo que pagó, en una buena operación. Pero el Barça no es un club vendedor. El adiós del brasileño es evidente que tiene el placet del entrenador Ernesto Valverde. El Mundial lo ha elevado, como ha hecho con Mina y Guangzhou Evergrande es un club con mucho dinero y ganas de triunfar.
EL BARÇA DEBERÁ ahora plantearse la contratación de un centrocampista más físico. Paulinho es muy bueno porque además de su capacidad defensiva y que nunca se complicaba la vida, tenía gol. Esa llegada de atrás le permitió a los blaugrana tener más definición que la que debía aportar Suárez y Messi. Se integró bien en el equipo y los pesos pesados lo arroparon, sabedores de su valía. Ahora vuelve a China y el Barça no debería olvidar porqué lo fichó. Necesita esas características.
EL FICHAJE DE COUTINHO por 150 millones también fue criticado en su día al ser el más caro de la historia blaugrana. Tras el Mundial también se ha revalorizado y ya se habla de 270 millones. Pero Cou debe llevar la etiqueta de intransferible. El Barça debe contar con él desde el primer encuentro. No es un jugador que esté a la venta, aunque Neymar apriete al PSG para que se lo lleve