La goleada en la grada fue del Barça
El color azulgrana tiñó las gradas del AT&T Stadium de Texas, con 54.726 espectadores
Segundo partido que el Barça jugaba en esta gira por Estados Unidos sin Messi, Suárez, Coutinho y cía, pero de nuevo hubo una muy buena entrada -54.726 espectadores sobre un aforo de 75.000 en el AT&T Stadium- y otra vez, como ante el Tottenham, el color predominante fue el azulgrana. Cada vez cala más la teoría de la directiva del Barça que el club se desplaza a Estados Unidos para consolidar y crecer más con la marca Barça y que para hacerlo, es importante que vengan todas las figuras, pero no es imprescindible para que los aficionados se vuelquen con su equipo, como volvió a quedar demostrado en Texas.
Antes del choque, precisamente la Peña Barça Dallas se encargó de organizar una ‘tailgate party’ (la fiesta del maletero vendría a ser, en alusión a que antes de los grandes partidos la gente se reúne a las afueras de los estadios con su maletero abierto para compartir la comida y la bebida que tienen depositados en él. De hecho, esta vez no fue en el parking sino en el estadio de los Texas Rangers de beisbol, que está justo al lado del AT&T. Cerca de unas 2.000 personas, en su mayoría miembros de la Peña de Dallas, pero también llegados de las cuatro peñas culés repartidas por todo el país, así de Canadá y de varios países de Centroamérica y Sudamérica , se reunieron desde las dos de la tarde para preparar el choque ante la Roma disfrutando de diversas actividades. Pudieron comer, cantar e incluso participar en un concurso de la Playstation. Fue una auténtica fiesta que duró más de cinco horas y que luego quedó algo empañada por el resultado de la Roma.
Sin embargo, la grada fue claramente de color azulgrana, señal de que el trabajo que está haciendo el club de querer penetrar en el mercado
de EE.UU. va dando frutos.
Ya en el estadio, tanto los aficionados de la peña de Dallas, como el público en general, se volvieron a emocionar con el canto a capela del himno americano en la voz de una soprano. Secadas las lágrimas de la emoción llegó el momento de hacer ruido (make noise), como pedían en los video marcadores gigantes. El colofón a la gran fiesta en el AT&T llegó con la ola, con independencia del resultado. Lo de ayer fue una fiesta y en la grada sí que goleó el Barça
Culés de Sudamérica, Canadá y EE.UU. se dieron cita antes en un acto de una peña