Un día para celebrar el gol 6.000
Messi podría volver a ser el autor de un gol ‘milenario’ del Barça en la Liga si ve puerta hoy en el debut frente al Alavés. Ya pudo conseguirlo en la última jornada de la Liga 20172018 ante la Real Sociedad pero marcó Coutinho. Hace una década, el argentino logró también el tanto 5.000. Fue el 1 de febrero de 2009, en Santander, de eso haría exactamente 9 años, 6 meses y 17 días. En esta ultima década, comparativamente, el Barça ha logrado multiplicar su potencial goleador, y mucho ha tenido que ver el argentino. Y es que entre el gol 4.000 y el 5.000, el equipo culé necesitó que transcurrieran casi 13 años.
El primer gol de la historia del Barça lo anotó Parera el 12 de febrero de 1929 en el campo del Racing. Acabó el encuentro firmando un doblete. El 1.000 fue obra de un argentino conocido futbolísticamente como Marco Aurelio, que también anotó un par de tantos en la goleada ante el Lleida (6-1) del 22 de octubre de 1950, correspondiente a la Liga 50-51, 22 años después del inicio de la Liga, aunque con la Guerra de por medio y con torneos entre 10 y 14 equipos.
El 12 de enero de 1964, más de 13 años más tarde, Pedro Zaballa logró el 2.000 en el 4-0 ante el Valencia. Debieron transcurrir cerca de 18 años hasta que Quini logró el gol 3.000. El 24 de enero de 1982, en el 4-3 al Castellón, el Barça parecía disparado hacia una Liga que no ganó. Como en el gol 2.000, el Valencia fue el rival protagonista en el tanto 4.000, pero esta vez el resultado fue adverso. El equipo ‘che’ ganó por 4-1 el 9 de marzo de 1996, 14 años después del 3.000, y el único gol azulgrana fue obra de Amor, hoy alto ejecutivo azulgrana.
Y así llegamos al 5.000 logrado por Leo en la victoria por 1-2 al Racing en El Sardinero. Aquel 1 de febrero de 2009 logró firmar un doblete que facilitó la consecución del título de Liga con Pep Guardiola en el banquillo. El segundo consecutivo. El canterano, como no, venía de lograr el 4.000 en el Camp Nou contando todas las competiciones
Leo firmó el 5.000 y podría repetir una década después