Zarpazo nocturno de Muniain
Su gol en el tiempo de prolongación dio la victoria al Athletic ante un Leganés que plantó cara en San Mamés
Muniain se sumó a las fiestas de Bilbao cuando en San Mamés se daba por empatado entre Athletic y Leganés. El capitán rojiblanco, muy entonado toda la noche, aprovechó un centro de Capa en el tiempo de prolongación para marcar el gol de la victoria. Berizzo ganaba así el pulso a su compatriota y también debutante Pellegrino.
La igualdad fue la tónica de este choque disputado en plena Aste Nagusia del Botxo. Los leones, con muchas caras nuevas en su once, trataron de llevar la iniciativa en todo momento ante un rival que supo defenderse con orden. La igualdad reinante en el marcador saltó por los aires cerca de la media hora de choque con un tanto del debutante Nolaskoain a la salida de un córner. Silva estableció la igualada seis minutos después.
El Leganés dio un paso hacia adelante tras el descanso. El Athletic, en plena fase de composición, no acabó de encontrarse a gusto hasta que apareció Muniain y dejó los tres puntos en casa. Cuando menos se lo esperaba la afición saltó la sorpresa.
Los locales tocaron, tocaron y tocaron con paciencia e insistencia, pero sin excesiva profundidad y pocos y malos remates. Un córner, sin embargo, permitió a Nolaskoain abrir el marcador antes de la primera media hora. Williams, tras un genial pase de Muniain, perdonó a continuación.
El empate visitante, sin embargo, llegó acto seguido tras una internada por banda derecha pepinera concretada, a la segunda, por Silva. El Leganés sacó petroleo a su primera aproximación seria sobre el marco local. Lo justo para irse 1-1 al descanso.
El control del Athletic disminuyó de forma notable en la reanudación. Los visitantes se atrevieron incluso a adelantar su línea de presión en función de la zona del campo por donde circulase el balón. Las llegadas locales, pese a todo, brillaron por su ausencia durante muchos minutos de este segundo periodo. Los leones se llevaron además un susto en forma de cabezazo de Carrillo que se fue fuera por poco.
Ambos entrenadores empezaron a buscar soluciones en el banquillo. Pellegrino apostó primero por Santos y después por Ojeda. Berizzo tiró de Capa y luego tuvo que sacar a Córdoba para cubrir la baja por lesión de Aduriz. El donostiarra, tras un remate marca de la casa sacado por Cuéllar, se tocó una pierna y pidió el cambio. Raúl García completó el capítulo de sustituciones rojiblanco a falta de un cuarto de hora. Unai Simón, acto seguido, se ganó el respeto de San Mamés con una gran mano a cabezazo a bocajarro de Ojeda. Y Muniain, cuando menos se lo esperaban en uno y otro bando, llegó a tiempo de sentenciar el choque con un remate a bocajarro