Arrojo pide billete al Mundial
Con cuatro bajas que en principio son fijas para el Mundial de Tenerife (Alba Torrens, Anna Cruz, Silvia Domínguez y Astou Ndour), Lucas Mondelo planteó el partido ante Bélgica en la semifinal del torneo de València como una oportunidad para las que aún se tienen que ganar la plaza en el avión y Belén Arrojo se fue directa a la ventanilla de la Fonteta para coger un billete.
La escolta granadina entró cuando peor estaba España y supo tirar de sus compañeras primero para neutralizar la ventaja que había cogido su rival y luego para ampliar la ventaja y finalmente para sentenciar el triunfo en este primer amistoso en esta segunda fase de la preparación.
España arrancó tan espesa que ni la clarividencia de Laia Palau lo pudo arreglar. Y Bélgica, a la que se medirá en la primera fase del torneo, le endosó un 12-23 de salida. El segundo cuarto lo cambió todo. Arrojo abrió el camino al aro belga con sus penetraciones y esa confianza llevó a España a aumentar su nivel físico en defensa. El trabajo de Gil neutralizó a Meesseman y la selección dejó más de siete minutos sin anotar a su rival y firmó un claro 22-4. En ataque, la clarividencia de Palau y el empuje de Conde y Leo Rodríguez se combinaron para llegar al descanso con una pequeña renta (34-27).
En la reanudación, entre Arrojo y Gil llevaron la ventaja al umbral de los diez puntos del que no se movió por los sólidos minutos de Bea Sánchez y la gran defensa, que llevó a España a encajar en los tres últimos cuartos los mismos 23 puntos que recibió en el primero.
Bélgica, que también reservó a Ann Wauters, no se rindió pero un certero triple de Arrojo acabó con las últimas esperanzas de su rival y selló su punto 14 que le convirtió en la máxima anotadora del choque.
En la final, que reeditará la del último Europeo, España se medirá con Francia, que sufrió más de los esperado ante la pujante Letonia en la primera semifinal. Dominó la primera parte pero se despistó en el tercer cuarto y Gruda y Johannes tuvieron que aparecer al final para resolver la papeleta y lograr una victoria mucho más holgada en el marcador (82-66) que en la pista