UN PARÓN PARA LA REFLEXIÓN
El Atlético, que firma el peor arranque de Liga de la ‘era Simeone’, debe mejorar antes de recibir al Eibar Los colchoneros tienen dos semanas por delante para corregir lo hecho mal en este inicio de curso
El Atlético de Madrid cosechó en Balaídos la primera derrota del curso. Tras empatar en Mestalla y ganar al Rayo en el Metropolitano, el conjunto rojiblanco se vio superado por el Celta, que se adelantó en el marcador nada más comenzar la segunda parte gracias a un gol de Maxi Gómez que llegó tras un inoportuno resbalón de Godín que dejó al delantero uruguayo solo ante Oblak.
Desde ese momento, el Atlético se convirtió en un juguete roto en manos del Celta, que pudo acabar goleando a un equipo, el colchonero, que ni siquiera remató a puerta en todo el choque. Mal los jugadores en el campo, y mal Diego Simeone en el banquillo con sus decisiones. Nadie estuvo bien en Balaídos y el Atlético se marcha al primer parón del curso con cuatro puntos de nueve posibles, en lo que es el peor arranque liguero con el Cholo en el banquillo.
Toca reflexionar, y el cuerpo técnico y los futbolistas tendrán días por delante para hacerlo. El proyecto más ambicioso de los últimos años bien lo merece. El Atlético debe mejorar, y mucho, para cumplir con las expectativas. Y debe hacerlo en varios aspectos, como por ejemplo, la seguridad defensiva. Tres goles en tres encuentros han recibido los rojiblancos, pero más allá de los números, están las sensaciones. Oblak salvó al Atlético en el tramo final del partido de Mestalla y ante el Rayo Vallecano.
Además, de los 270 minutos disputados en Liga, el equipo madrileño apenas ha brillado en 45. Media hora en la primera parte frente al Valencia y un cuarto de hora en Balaídos, desde el 30’ hasta el descanso. El resto, mal, con una sorprendente incapacidad para crear juego y ocasiones. Porque el gol es otro de los problemas del Atlético en este inicio de campeonato. Dos ‘dianas’ conseguidas en tres encuentros. Y muy pocas oportunidades más para ver puerta.
Después de pasar por encima del Real Madrid en la prórroga de la Supercopa de Europa, el conjunto rojiblanco presenta un estado físico alarmante. Se ve a los jugadores faltos de piernas, sin la chispa adecuada para presionar al equipo contrario, una de las señas de identidad de la escuadra de Simeone. A ello ha contribuido la extraña pretemporada realizada por los colchoneros, con muchos de sus jugadores básicos incorporándose tarde a los entrenamientos después de haber participado en el Mundial de Rusia, siendo Griezmann el más claro ejemplo de la falta de ritmo que presenta el equipo madrileño.
Y luego está el Cholo, en el centro de las críticas tras el choque de Balaídos. Sorprendió su apuesta por Savic como lateral derecho teniendo a Arias, que se desempeña en esa demarcación, y a otros hombres como Giménez o Thomas, que ya saben lo que es jugar ahí. Además, su decisión de quitar a Giménez para meter a Arias con Savic amonestado no fue la mejor, pues justo después, el montenegrino, fuera de sitio toda la tarde, vio la segunda amarilla y fue expulsado. Y tampoco se entendió la ausencia de Lemar de un once inicial.
El Atlético no ha empezado con buen pie el campeonato. Pero hay tiempo por delante para corregir y mejorar. Simeone y sus jugadores son conscientes de ello. Se marchan al parón dolidos y enfadados, pero es una ocasión de oro para comenzar a crecer.
Un parón para la reflexión en el Atlético de Madrid