Márquez regresa a territorio hostil
El año pasado Marc fue abucheado en Misano, sus caídas celebradas por la grada y acabó respondiendo a besos
Buen intento el de Marc Márquez en la rueda de prensa de Misano para que Valentino Rossi apaciguara a sus adeptos de cara al fin de semana de Gran Premio, pero el tiro le salió por la culata con una nueva, la segunda, negación de Valentino Rossi a aceptar sus disculpas por lo sucedido en Argentina y firmar la paz. Ahí en abril el de Cervera cometió el error de llevarse por delante al de Tavullia en su deseo de ganar la carrera viniendo de dos penalizaciones previas. La precaria relación entre ellos, más en pista que fuera de ella, se volvió a dinamitar. Rossi se cargó de razón para lanzar una proclama incendiaria y las legiones de fans del Dottore volvieron a hacerle la vida imposible al joven campeón. Se han recrudecido los pitidos e insultos y se han jaleado sus caídas. Marc pisa este fin de semana el territorio más hostil, a apenas 10 kilómetros de la Tavullia de Rossi y donde el color amarillo tiñe todo el territorio para que quede claro quién manda por estos pagos.
El precedente en Misano no invita a que Marc Márquez vaya a vivir un fin de semana normal y va a ser uno de esos Grandes Premios de no dejarse llevar por el corazón porque le van a pasar el capote ante los ojos al líder. El año pasado en Misano ya vivió un fin de semana caliente y la ausencia de Rossi por la lesión en su pierna contraída días no hizo más que enfadar a los fans del 46.
Y llegó el ‘warmup' de MotoGP que lideró Márquez y ya casi al final se fue al suelo lo que arrancó los aplausos de los fans. Regresó por el vial al box de paquete en un scooter de un comisario y los silbidos y abucheos arreciaron. Marc contestó con besos a la grada. “Besos y amor que no falten nunca”, dijo entre risas. Y se reprodujeron los abucheos e insultos en el podio después de llevarse la victoria tras lo cual hizo la siguiente reflexión: “Al final tienes que convivir con ello, aquí en Italia sobre todo. Los del podio los puedes llegar a entender, pero lo que me hace sentir mal es que después de una caída aplaudan. Que celebren la caída de un piloto, de cualquier piloto, es una falta de responsabilidad, nos estamos jugando la vida a 300 km por hora. Puedes apoyar a un piloto u otro, pero no deseas la caída de nadie. Espero que mis seguidores y aficionados nunca jamás aplaudan la caída de otro piloto, sea quien sea”.
Y sucedió el episodio de Argentina este abril y dos meses más tarde al llegar a Mugello se recrudeció el ambiente en su contra insistiendo ahí donde más le duele: la celebración de sus caídas. Esta vez sucedió apenas unos minutos después de que Pirro se jugase el físico en una espeluznante caída y aún estaba tendido mientras lo trataban los médicos: “Ya me lo dijeron todo cuando el viernes estaba un piloto en la gravilla (Pirro), que no sabíamos cómo estaba, no sabíamos si estaba vivo o muerto, porque después de una caída a 300 te puedes imaginar lo que puede llegar a pasar, y sólo estaban preocupados de abuchear a otro cuando le enfocaban las cámaras. Es curioso que celebren más la caída de un piloto que la victoria de otro. Es lo más curioso. Pero estamos en este punto. También hay diferentes factores que han hecho llegar allí, no viene por sí solo. Lo dije en 2015 y 2016: espero que nunca mis aficionados lo hagan, que sean aficionados al motociclismo y tengan respeto a todos”, dijo
Se vio en Mugello que tras la acción a Rossi en Termas rebrotó el odio contra Marc
“Lo más curioso es que celebren más la caída de un piloto que la victoria de otro”