Cumbre por la renovación de Valverde
Josep Maria Bartomeu y el representante de Ernesto Valverde, Iñaki Ibáñez, celebraron una cumbre en la Llotja del Camp Nou el pasado martes, tras el Barça-PSV de Champions, con el futuro del técnico extremeño sobre la mesa. No hay excesiva prisa en el club barcelonista ni en el ‘Txingurri’ para modificar las condiciones actuales del contrato del entrenador con el fin de ampliarlo, pero sí existe la voluntad de ir tanteando el terreno para conocer su predisposición y para comunicar la del club. Ya avanzó MD que en septiembre ya se quería sondear la situación del técnico. Así ha sido. Sobre todo, el Barça desea evitar situaciones de incertidumbre tanto mediática como interna sobre el futuro del Valverde, que no quiere que sea visto por el vestuario como un entrenador con fecha de caducidad.
La reunión del pasado martes, que tuvo lugar en el despacho presidencial de la zona de la Llotja, fue una toma de contacto, un intercambio de impresiones entre ambas partes, para constatar la buena sintonía existente y el deseo de seguir por el mismo camino.
Valverde, fuerte
El propio Valverde dejó entrever ayer, en la previa del Barça-Girona, que no siente todavía el desgaste de un cargo tan estresante como el de entrenador del FC Barcelona, por lo que no se dan las circunstancias que sí se dieron en su día con Pep Guardiola y con Luis Enrique. En el caso de Guardiola fue en su cuarta temporada en el banquillo; y en el caso de Luis Enrique, en la tercera. En ambos casos, los técnicos advirtieron de su cansancio al club más o menos en las alturas de temporada en las que estamos ahora; Guardiola, a Zubizarreta (primero lo negó y más tarde lo admitió) y Luis Enrique, a Robert.
Con el ‘Txingurri’, de momento no se da el caso: no ha llegado al límite de su resistencia. La cumbre con el representante del técnico confirmó al presidente barcelonista las buenas vibraciones y la buena predisposición de Valverde a seguir. A pesar de algunas diferencias puntuales en cuanto a algunos fichajes, Valverde está contento con su equipo y con la plantilla, de la que está convencido de que puede seguir sacando un rendimiento satisfactorio.
Y el club está tranquilo por esos mensajes que le llegan del entorno del técnico. Se desea evitar a toda costa un serial de varios meses con la renovación del técnico como temática en cada rueda de prensa. Tranquilidad, por lo tanto, sin que ello signifique no ir avanzando de la mano de Valverde de cara a consolidar un futuro que dé estabilidad a medio plazo. Evidentemente, también hay satisfacción tanto entre la junta directiva como entre la dirección deportiva por el trabajo del entrenador extremeño. Hay margen de confianza pese a que el traspié de Roma hizo daño en su momento y generó dudas. Ahora, ambas partes hicieron una manifestación de buenas intenciones.
El beneplácito del vestuario
Otro apartado a tener en cuenta es el vestuario. En el club barcelonista también hay satisfacción por los mensajes que llegan de la plantilla barcelonista, que se siente a gusto con un entrenador con el que mantienen una cordial relación. Al
club le consta la buena sintonía existente entre Valverde y sus jugadores, que valoran del técnico la atmósfera positiva que ha sido capaz de mantener dentro del vestuario.
De modo que en los próximos meses seguirán los contactos al máximo nivel entre el club barcelonista y el entorno del técnico, como el que se produjo en la Llotja el día del Barça-PSV. Sin precipitaciones, y si los resultados siguen acompañando, el Barça no descarta ampliar el contrato del técnico antes de los plazos establecidos en su actual contrato. Por supuesto, ambas partes necesitan que el rendimiento siga siendo parecido al de los primeros quince meses de Valverde. Si los resultados no estropean los planes, Valverde no será en el Barça un entrenador con una fecha de caducidad marcada en el calendario. Este es el extremo que Bartomeu desea evitar
Bartomeu e Iñaki Ibáñez, agente del técnico, se vieron en la Llotja tras el Barça-PSV
El club quiere que Valverde siga y la parte del técnico recibió el mensaje con satisfacción
El Barça no quiere que Ernesto dé la imagen de un técnico con fecha de caducidad