El vestuario, enrabietado
Solo Serbio Busquets, a pie de campo, y Arturo Vidal, en zona mixta, atendieron a los medios de comunicación al final del un encuentro que dejó al vestuario del Barça muy caliente. La contrariedad por la expulsión de Clément Lenglet fue reflejada por el segundo capitán y el chileno. También por Ernesto Valverde y Guillermo Amor. Pero el resto prefirió morderse la lengua.
Desde el Barça se insiste en que no están en contra del VAR, recordando que ha sido el club grande que más lo ha impulsado, y defiende su utilidad pero bien empleado sabiendo que es más fácil inducir una decisión desde una sala que pitar delante de miles de espectadores en un estadio algo sobre lo que el VAR no influye, como una segunda amarilla. Sin ir más lejos, la que no vio Illarramendi en Anoeta la jornada anterior.
Alegaciones a Competición
Según avanzó RAC 1, el FC Barcelona presentará alegaciones al Comité de Competición con imágenes de vídeo para que se revoque la roja recibida por Lenglet. Antes de que empiece la sexta jornada esta noche, el órgano se reunirá para decidir la sanción. En principio, el francés solo debería recibir un partido de sanción en caso de no prosperar el recurso del club azulgrana, por lo que se perdería la visita de mañana (20.00 h./beIN Liga) al Leganés. Umtiti está llamado a ocupar su lugar en la zaga en un encuentro que era propicio para que su compatriota cogiera ritmo de cara al Tottenham-Barça del miércoles 3 en la Champions, cuando Umtiti no podrá jugar por sanción al haber visto la roja ante el PSV.
Primera expulsión en España
Lenglet, sin fama de duro y solo 16 amarillas en sus 74 partidos con el Sevilla, vio su primera roja en el fútbol español