¿Coutinho condiciona el equilibrio?
Coutinho no fue titular en Anoeta porque llegó en viernes del parón FIFA y sólo pudo entrenar un día con el equipo. Coutinho no fue titular ante el Girona porque el entrenador consideró que, al fin, era el día ideal para las rotaciones y poner a Arthur y Arturo Vidal desde el inicio. La más preocupante de Coutinho, el jugador que vino para ser trascendente en ataque, no es que sea titular o suplente, intimidador o revulsivo.
Lo que nos dejó perplejos fue la confesión de Valverde que admitió que Coutinho condiciona el equilibrio del equipo. Sabíamos que aprender a hacer de Iniesta no sería un paso en barca, pero en lo que va de 2018, las características y el rendimiento del brasileño le han dado muchas más cosas al equipo de las que ha quitado. Ha aportado gol, amenaza desde fuera del área, verticalidad al equipo, trascendencia en el último pase, gran entendimiento con Messi y desequilibrio en ataque.
En cambio, al entrenador, le preocupa el desequilibrio en defensa. “Es una posición que él conoce, en la que se desenvuelve bien. Sabemos que su forma de jugar es vertical, muy de jugársela, de hacer el uno contra uno, pero es verdad que nos condiciona un poco para mantener el equilibrio”. De acuerdo. Pero el equilibrio del equipo, que tan importante fue para el doblete del pasado año, no se ha evaporado por la marcha de Paulinho o por la verticalidad arriesgada de Coutinho.
Depende de dónde hagas la presión tras perdida, de cómo la hagas, de dónde estén los dos laterales, de la colocación de los dos centrales con relación a Sergio Busquets, del cierre del otro interior de corte más defensivo. Depende, también, de la alineación del entrenador. Valverde ha pasado de sentirse cómodo en el Barça con un 4-4-2 desacomplejado (con la excusa de la larga lesión de Dembélé) a poner un equipo ultraofensivo, con Coutinho, Dembélé, Suárez y Messi en el mismo equipo. Claro que va a costar correr para atrás y cerrar espacios. Si con el tridente, en tiempos de Neymar, el desequilibrio defensivo era evidente porque sin balón el equipo quedaba roto, el reto actual es hacer un balance rápido y eficiente para no dar tantas opciones a equipos como Huesca o Girona. A eso, claro, cabe añadir que el factor corrector de Arturo Vidal, por ahora, dista mucho de lo esperado. Quizá desequilibra más un mal pase en zona de transición que una pérdida arriba.
También crea desequilibrio, quizás, el inicio titubeante de un campeón del mundo como Umtiti. Se ha venido tan arriba que su fútbol ha ido un poco a bajo. Estamos empezando la temporada. Seguro de que los jugadores subirán su rendimiento, todos entenderán mejor lo que se les pide en el campo y Valverde sabrá arreglar el desequilibrio sin apuntar al fichaje más caro de la historia del Barça
El brasileño le ha dado muchas más cosas al equipo de las que ha quitado