Acertar con el material es clave
Las opciones de elección de esquís y botas son muchas y variadas
El escaparate de los deportes de invierno en el inicio de una nueva temporada es enorme, con muchas referencias para todos los bolsillos y perfiles de esquiador. Las imágenes de las montañas nevadas acelera el corazón de los esquiadores, que al instante sienten la necesidad de reno- var su equipo, y, los que siempre lo habían alquilado hasta ahora o no disponían de él, de hacerse con uno nuevo. Nunca está de más disponer de unos nuevos esquís y botas siempre y cuando nos la podamos permitir, pero no siempre es necesario.
Varias premisas. Lo más aconsejable, si no se quiere tirar de mucha VISA, es llevar los esquís al taller y que el skiman de confianza les haga suelas y cantos, que los deje inmaculados para que respondan como se espera sobre cualquier tipo de nieve. En cuanto a las botas, puede que nunca nos hayamos acabado de encontrar cómodos con ellas, que sí, que responden cuando se les exige, pero igual no son tan cómodas ni prestacionales como se supondría. Antes de cambiar de calzado, una opción 100% recomendable es el termoformado. Multitud de marcas ofrecen termoformar sus botas, moldear los botines y la carcasa, haciendo que éstas se ajusten como un guante al pie, lo que es sinónimo de comodidad y precisión.
Como con los esquís, existen multitud de botas en función de la modalidad alpina elegida –pista, fuera pista, all mountain, touring, etc– y no todas las botas están hechas para todos los pies. Las hay más estrechas o más anchas, por ejemplo. Y lo mismo sucede con los esquís, donde las opciones son incontables, pero la mayoría de propuestas en el mercado obedecen a una premisa muy extendida: la de facilitar unas tablas que se muevan como pez en el agua en todos los terrenos. No en vano, pese a que hay tendencias al alza como el esquí de montaña en sus diferentes variantes, el grueso de las ventas se centran en los esquís todo terreno.
Y después hay dos máximas que no fallan nunca. Pasar por el alquiler y calzarse material novedoso para nuestros pies y apuntarse a uno de los test que las marcas realizan en las estaciones, una forma excelente de probar todo tipo de material en una jornada de esquí