Valverde se sale con la suya
Con Jeison Murillo (26 años) lo que está asegurado es que Valverde va a contar con él. La secretaría técnica quería madurar otra opción y disponer de más tiempo para tomar una decisión, pero el 'Txingurri' insistió en que el día 2 de enero, a la vuelta de las vacaciones navideñas, solo tendría sanos a Piqué y Lenglet si no cae alguno ante el Celta y un calendario apretado por delante. Solo dos para tanta tralla con el gran objetivo de la Champions esperando en febrero. Las expectativas para contar con asiduidad con Vermaelen (un mes de baja) y Umtiti (llega de Doha este fin de semana) están en el aire y el club no ha querido dejar nada en el aire con las ilusiones puestas en el gran objetivo de corona continental. Con la cesión de Murillo, pues, se evita lo sucedido la pasada temporada cuando el Barça pagó 12 millones al Palmeiras por la opción preferencial sobre Yerry Mina. El hoy jugador del Everton nunca contó con la confianza del entrenador puesto que solo lo hizo jugar en dos partidos, ante el Getafe formando tándem con Digne (0-0) y en la única derrota blaugrana de Liga ante el Levante con el equipo ya campeón (5-4).
LAS OTRAS ALTERNATIVAS QUE SE barajaban, en algunos casos a punto de caramelo, ya son papel mojado. Valverde acredita a Jeison y no tendrá excusas para no contar con él. El pulso, si se puede llamar así, demuestra que el técnico no es un hombre dado a las aventuras. El colombiano de Cali tiene a su favor que tendrá una adaptación fácil por el idioma, tiene experiencia en Primera tras pasar por Granada y Valencia y, por lo tanto, conoce a la perfección a los rivales. La opción del refuerzo extranjero, veterano y con traspaso incluido, supondría una hipoteca para reforzarse en verano con un central de lujo. Lo negativo es que ni Chumi, Cuenca y Mingueza han contado. El Barça pagará un alquiler por Murillo de 1.2 millones, además de su ficha. Se pensaba que este refuerzo era para 5-6 partidos, pero es muy posible que puedan ser más. Murillo, el suplente de Yerry en la selección cafetera, lo tendrá más fácil que su compatriota