Núria Pau ve la luz al final del túnel
Tras superar una lesión y perder sponsors, el 5 de enero debutará en la Copa del Mundo
Hay situaciones en la vida antes las que hay que quitarse el sombrero y que aún sabiendo de la pasión que hay detrás cuesta de entender, y la de Núria Pau es una de ellas. La esquiadora de Ribes de Freser, integrante del equipo A de las estructuras deportivas de la Real Federación Española de Deportes de Invierno (RFEDI), vio truncado el inicio de su temporada europea tras sufrir una lesión de tobillo entrenando en casa, en una campaña en la que ha perdido algunos patrocinadores importantes y en la que va a tener que seguir rascándose el bolsillo para seguir cumpliendo el sueño de esquiar, que en definitiva no deja de ser su trabajo, lo que la mantiene ocupada las 24 horas del día.
Campeona de España de slalom y una de las mejores 100 esquiadoras de SL del mundo, Núria tiene el privilegio por primera vez en su vida de no tener que pagar su programa deportivo, lo que agradecerán sus padres, los verdaderos financiadores de la trayectoria deportiva de su hija.”Hace mucho tiempo que gasto más de lo que ingreso. La última temporada tenía la ayuda principal del Pirineu de Girona y de la Vall de Ribes, pero ésta sólo tendré esta última. Estoy muy contenta, pero no es suficiente
LAS FRASES
Núria Pau “Es el primer año que no pago nada de mi programa deportivo”
para cubrir mis gastos –tiene que pagarse el material de esquí–. Mis padres me ayudan con la Universidad. A nivel deportivo no tengo tiempo para trabajar en otra cosa y tener ingresos regulares. Mi dedicación al deporte es al 100%. En casos como el mío, deportistas de alto nivel, los ingresos llegan de las becas, patrocinadores, premios o publicidad, pero yo no he podido estar tranquila en el sentido económico y pensar sólo en entrenar, como algunos de mis compañeros”. Dedicada en cuerpo y alma a su deporte, Núria va con la calculadora en el bolsillo. Tiene claro que para cumplir una campaña con cara y ojos, necesita “unos 15.000 euros, para fisios, desplazamientos y lo que conllevan, material o comida”.
El Mundial, piedra de toque
Pese a todo, Pau no pierde la concentración ni la fe en si misma. Tras la lesión, regresó a la competición con varias pruebas FIS y alguna Copa de Europa. Sabe que lo único que está en su mano para revertir una situación –por la que, por otro lado, pasan muchos deportistas– es esquiar lo mejor que sabe, en una temporada importante para ella, en la “me he propuesto entrar en el top 75 de slalom y en el 100 de gigante”.
El 5 de enero debutará en la Copa del Mundo de Zagreb (Croacia), después de 46 presencias en la Copa de Europa, y en febrero disputará su primer Mundial en Are (Suecia), donde buscará ser de las 30 primeras. Y. después, hay que saber llevar toda esta presión, que no es poca. Su futuro puede decidirse por unos segundos, por unas décimas
“El presupuesto de una temporada sería de unos 15.000 euros”
“Quiero estar en el top 75 de slalom del mundo”