Un respiro antes del duelo decisivo
Dos Clásicos en una semana ganados en el Bernabéu no se olvidan fácilmente además deja tocado al Madrid. Toca pensar en lo siguiente, pero es evidente que asegurarse una final y eliminar casi al Madrid de la pugna por la Liga crea buenas sensaciones en el entorno blaugrana. Sin embargo, fueron dos victorias muy diferentes. Mientras la primera era determinante y el partido siempre estuvo más abierto (pese a que el resultado grite lo contrario), en la segunda ambos equipos fueron más prudentes. Si en la primera el Madrid dominó y creó peligro, en ningún momento supo definir, que es lo que caracteriza a los equipos grandes y eso lo hizo el Barça a través de Suárez. En la segunda, los azulgrana controlaron más tiempo el balón y también supieron ganar.
Parte de este control se debe a la presencia de Arthur junto a Busquets y a la ubicación de
Sergi Roberto de lateral y dando una salida de balón mucho más limpia. Y no olvidemos que la pareja Piqué
Lenglet estuvo superlativa no solo defendiendo sino moviendo el balón desde atrás. De los dos Clásicos este control es con el que deben quedarse los de Valverde, pero también deben recordar que el Atlético no cede en la Liga y que si bien este es un buen fin de semana para hacer rotaciones, hay que seguir ganando frente al Rayo. Presumo que Busquets y
Piqué descansarán ante el Rayo en vistas a la Champions, que ya asoma por el horizonte y es el primer partido definitivo del Barça esta temporada en la que, recordemos, el objetivo principal es la orejona. Mantengamos los pies en la tierra porque el resultado fuera no fue bueno. La actitud de los jugadores del Lyon no será la misma y el 0-0 resulta un tanto engañoso