El mal Karma Merengue
La ley del karma es como una fuerza de gravitación moral: cada hecho altera el equilibrio del cosmos y ese equilibrio debería restablecerse a costa de quien lo haya alterado. En catalán hay una formulación más corta: “Tal faràs, tal trobaràs”. El Madrid ha querido olvidar que las últimas Champions que ganó fueron con trampa. Gol en el minuto 8 del añadido tras lesionar y sacar en camilla a los laterales del Atlético. Expulsión de Vidal cuando el Bayern ganaba y dos goles en offside. Penalti a la Juve en el minuto 91, que le estaba ganado por 0-3. Ramos le rompe el brazo a Salah y golpea al portero del Liverpool para ganar el año pasado. Si van por nota, estudian anteriores Champions, como la que le roban al Manchester United y el gol de Mijatovic en off-side contra la Juve en 1998. De las trampas perpetradas con ayuda de los árbitros españoles hay una hemeroteca llena. Basta recordar el cínico de Undiano
Mallenco, con Messi sangrando por el codazo de
Ramos, gritando “se ha tirado, se ha tirado”. Tanta porquería se tiene que compensar algún día y le tocó al Ajax -justicia poética de Johan Cruyffrecoger el mal karma del Madrid y devolvérselo en forma de cuatro goles, dos palos y dos lesiones en un solo partido. Han necesitado cuatro goles en casa y dos repasos del Barça para querer mirar la realidad, y la realidad, como llevo meses y años señalándolo es que el Madrid no tiene sistema de juego y practica aquel fútbol de pelotazo adelante y centro a la cazuela que tenían los ingleses antes de que Hungría les mostrara el fútbol moderno. De Hungría aprendió Holanda