Otra remontada con cambio táctico
Como en Sevilla, Valverde cambió de sistema en el descanso para dar la vuelta al marcador
El Barça se está aficionando a la remontadas. Como en Sevilla hace quince días, el conjunto azulgrana tuvo que remontar un gol inicial del rival para poder sumar tres puntos y de nuevo Valverde tuvo que agitar la libreta para mantener la distancia con el Atlético.
Igual que en Sevilla, Valverde reclamó a Dembélé en el descanso. Apostó por el francés para darle una marcha más al equipo y retocó el dibujo táctico, ya que el 4-3-3 habitual pasó a ser un 4-2-3-1, como en el Pizjuán. Busquets y Arturo Vidal formaron el doble pivote, con Dembélé y Coutinho por las bandas, Messi en la media punta y Suárez arriba. De nuevo los cuatro juntos en un mismo once.
Y la apuesta de nuevo le salió cara a Valverde, ya que a los pocos minutos de la reanudación el Barça ya ganaba por 2 a 1. Con el paso de los minutos y viendo que el marcador seguía ajustado, el técnico decidió volver a tocar la libreta y llamó a Rakitic para volver de nuevo al 4-3-3 y sentar a Coutinho. Un cambio conservador para asegurar el control y evitar sorpresas. El croata, en su
primera intervención, condujo la contra, hizo una pared con Luis Suárez y asistió al uruguayo para sentenciar el partido.
Nueva remontada del Barça, que ya suma 20 puntos esta temporada logrados en partidos en los que empezó perdiendo, más que ningún otro equipo, según las estadísticas de Opta. Con el partido resuelto, Valverde sacó a Malcom por Busquets y volvió de nuevo al 4-2-3-1. Sigue probando el técnico un dibujo en el que Messi disfruta como mediapunta y en el que tienen cabida los cuatro ‘mosqueteros’: el argentino, Dembélé, Suárez y un Coutinho al que el técnico espera recuperar, aunque ayer escuchó pitos por parte de un sector de la grada. Valverde sigue empeñando en demostrar que pueden jugar juntos
El técnico probó de nuevo la fórmula en la que caben Dembélé, Messi, Suárez y ‘Cou'