Solari sigue en la penumbra
Ganó con las luces de emergencia en Zorrilla, donde hubo un apagón antes del partido
El estadio José Zorrilla se quedó sin luz en los prolegómenos del encuentro, pero el Real Madrid de Solari sigue en la penumbra tras el sonrojante KO en la Champions. El 1-4 de anoche en Valladolid, curiosamente el mismo resultado que avergonzó al madridismo ante el Ajax, endulzó la agonía del técnico argentino, que vio frenada la sangría derrotas tras los dos Clásicos frente al Barça y el doloroso adiós a Europa en el mismísimo Bernabéu.
La llegada del autobús del Madrid a Zorrilla coincidió con un monumental apagón que pudo solucionarse cuando apenas restaban 15 minutos para el inicio del partido. Más de uno de la expedición merengue pensó que les ha mirado un tuerto después de tantos sobresaltos en los últimos días. Los responsables de mantenimiento del estadio tuvieron que trabajar a toda prisa para solucionar el problema, aunque no se llegó a temer por un aplazamiento del encuentro.
Los de Solari se presentaron en Valladolid con mínima ilusiones tras despedirse en apenas seis días de la Copa, de la Champions y virtualmente de LaLiga. Demasiado para un madridismo que, encima, ve al Barça de lo más enchufado en pos del ‘triplete de oro’. Aunque la luz se hizo finalmente en Zorrilla, el Madrid saltó al terreno de juego en pleno cortocircuito, pero le favoreció el infortunio de un Valladolid con dos tantos anulados, un penalti lanzado de pena y un balón al poste.
Pese al triunfo, Solari está sentenciado, mientras José Mourinho sigue con las maletas preparadas para volver en cualquier momento al Real. Es el deseo de Florentino para acabar con un incendio que no lo sofoca la goleada en Valladolid, aunque ya se sabe que el luso es de los que apaga los fuegos con gasolina.
Ramos, que no jugó por sanción, viajó con el equipo a Valladolid para apoyar a sus compañeros. Estuvo presente en la charla técnica de Solari y sólo le faltó sentarse en el banquillo. De ahí salió Marcelo, uno de los marginados del técnico argentino, para sustituir en el minuto 89 a un Reguilón con síntomas de estar tocado. Benzema tuvo el detalle de ponerle el brazalete de capitán al brasileño, dándole además un abrazo. El francés firmó un doblete tardío tras no ver puerta en los dos Clásicos ni en la debacle ante el Ajax
Karim Benzema, sin gol en los dos Clásicos y en la debacle contra el Ajax, despertó tarde
Marcelo, el marginado capitán merengue, entró en el minuto 89 con todo ya decidido