ADIÓS CRUEL
El pentacampeón se despide en Praga tras encajar dos goles en la prórroga, el último rocambolesco Los checos, que nunca se rindieron pese al 2-3 de Franco Vázquez, dejan a los de Machín en crisis
El Sevilla dijo adiós a su competición, la Europa League, de la forma más cruel. Después de sufrir en un partido con muchos goles y una prórroga, después de darle la vuelta al 2-2 que el Slavia de Praga logró en Nervión con un gol del Mudo Vázquez en la prórroga, el equipo de Pablo Machín se dejó empatar, y aunque con ese resultado estaba en cuartos, recibió un gol otra vez de carambola en el último minuto de la prórroga que devuelve la crisis al vestuario y pone al técnico de nuevo en la cuerda floja.
Al Sevilla le fueron mal las cosas desde el inicio. Sufrió con el mayor físico de los checos y no se adaptó a un terreno de juego irregular. Así y todo, el holandés Promes fue el hombre más activo de los de Machín desde el minuto uno. Probó fortuna con un tirazo que estuvo a punto de sorprender al Slavia. Desde su posición de carrilero izquierdo buscaba el tiro por dentro e hizo lucirse a Kolar en el minuto 8 con un balón que buscaba el poste bajo de la meta checa.
Fue una muestra de las intenciones nervionenses, pero algo tímida porque enseguida el
Sevilla empezó a retroceder ante el empuje de los locales. Hasta que Carriço cedió un córner que, mal defendido por los andaluces, se convirtió en el 1-0.
Skoda peinó libre de marca al corazón del área y Ngadeu fusilaba a Vaclik.
Machín no daba crédito y ciertamente el pase se le ponía muy complicado al Sevilla, que, no obstante lo intentaba, intensificando sus llegadas conforme se acercaba el descanso. Promes, otra vez el holandés, mandaba un balón al larguero y pocos minutos después provocaba un penalti en una salida de Kolar de transformaba Ben Yedder en el 1-1 en un momento clave, justo antes de pasar por la caseta.
Pero la vuelta escondía otra sorpresa desagradable para los andaluces en forma de otro penalti, pero en su área, en un forcejeo de Jesús Navas con Boril. Fue muy riguroso y la transformación de Soucek volvía a poner al Sevilla en desventaja. Pero fue entonces cuando apareció Munir para meter el gol de la noche, una espectacular volea que entró por la escuadra y que igualaba la eliminatoria. El 2-2 ponía las cosas a cero y el Sevilla tuvo una fase en la que fue más inteligente.
Esperó a la prórroga y dio el primer golpe en un gran pase de Promes que cabeceó el Mudo. Con 2-3, el Sevilla estaba dentro, pero empezó a retroceder. Fruto de ello llegó un nuevo empate por medio de Van Buren. 3-3 y había que sufrir unos minutos pero el Sevilla pasaba. Hasta que en el último minuto, una falta acabó en varios rebotes y Kjaer no fue capaz de evitar sobre la línea el gol de Traoré. El Slavia eliminaba al pentacampeón. La crisis vuelve
En el 119’, Touré marcó el 4-3 con un remate flojo que Kjaer fue incapaz de desviar
Ahora sinceramente lo que menos pienso es en el tema personal, quiero levantar el ánimo del equipo”
Sin el gol en el último minuto no hubiese sido un desastre defensivo el partido”
Es muy duro. Teníamos una ventaja en la prórroga y nos han eliminado. No puedo más que felicitar al Slavia por su clasificación”