Echan a Machín y negocian con Monchi
Caparrós releva al soriano, una decisión desencadenada por el KO europeo
El Sevilla destituyó ayer a Pablo Machín como entrenador del primer equipo, una decisión que llega como consecuencia de la mala racha de resultados y precipitada por la eliminación de la Europa League en Praga tras caer ante el Slavia en la prórroga después incluso de remontar la eliminatoria (4-3). Su cargo será ocupado por Joaquín Caparrós, hasta ayer director del área de fútbol, de aquí al final de temporada y el club negocia con Monchi para que el ex director deportivo de la Roma regrese a Nervión una vez que se ha desvinculado del club italiano.
Caparrós, con Carlos Marchena y Paco Gallardo como ayudantes, se sentará en el banquillo en el partido ante el Espanyol de mañana, cita en la que llegará a los 500 encuentros en Primera, y será su tercera etapa al frente del equipo después de dirigir al Sevilla las cuatro últimas jornadas de la pasada Liga.
El utrerano reconoció que la decisión de prescindir de Machín supone aceptar el fracaso del proyecto. “No nos ha salido bien, así de claro. Soy consciente de que es una situación difícil, que no me gusta nada por la salida de Machín. Habíamos hecho una apuesta con él. He estado hablando personalmente con él, pero lo siento. Ahora la ilusión está. Estoy con muchas ganas y confío en la plantilla, hay jugadores con un altísimo nivel”, dijo el técnico, que reconoció que el objetivo sigue siendo clasificar al equipo entre las cuatro plazas que dan acceso a la Liga de Campeones.
La mala racha de resultado en la Liga, con 6 puntos de 30 disputados, había quedado rota con el 5-2 logrado ante la Real Sociedad, pero el palo recibido en la Europa League ha sido el detonante.
El club está instalado en una crisis que ya salpica al Consejo, con cada vez más rumores sobre la venta a un inversor extranjero, así que la reacción del club es trabajar en un regreso que sí ilusiona al sevillismo, el de Monchi. “Hemos pensado en el mejor director deportivo posible y el mejor es Monchi y hemos contactado con él. Hemos advertido una receptividad. Se lo hemos explicado todo y hay que coincidir en un plan de futuro. Soy muy optimista porque lo he visto muy receptivo”, dijo el presidente José Castro, que ve a Caparrós capacitado para sacar la situación adelante “porque conoce el club y la plantilla, que además confeccionó él”.
La apuesta por Pablo Machín tuvo ilusionado al sevillismo durante el primer tramo liguero, en el que el Sevilla se codeó con el Barcelona en lo más alto de la Liga, incluso alcanzando el liderato en dos jornadas (la última en la decimotercera). Pero los resultados en 2019 y el rendimiento fuera de casa (no gana desde septiembre) fueron desastrosos