Mundo Deportivo (Barcelona)

De jugar al despiste a sacar el martillo

Mercedes se escondió en los test de pretempora­da y ha empezado con más fuerza en Australia, algo que preocupa a Vettel y a Ferrari

- Fabio Marchi

Primer día en la oficina para todos los pilotos, y las cosas cambiaron radicalmen­te. Sebastian Vettel no podía estar contento con lo vivido en la primera jornada del GP de Australia de F1, la carrera inaugural del año. Todo el mundo daba como favorito a Ferrari tras el buen rendimient­o mostrado por el germano y Leclerc a los mandos de un SF90 que se mostró como el mejor coche de la parrilla en pretempora­da. Pero como ya avisamos desde hace semanas, los tiempos en los test son muy engañosos. Cada equipo trata de esconder su verdadero rendimient­o. Y en eso, Mercedes parece haberse llevado el Oscar. Hizo una actuación sublime en Barcelona. Allí, parecía estar al borde del precipicio. Hamilton destacaba lo rápido que era Ferrari, que “hay mucho trabajo por hacer” y que el de 2019 sería “el reto más duro” de su carrera. Lo comparó a escalar una montaña. La más alta para él.

Mientras, en Ferrari no se fiaban. Eran cautelosos, pero con una sonrisa que querían convertir en carcajada de victoria en Australia corroboran­do su supuesta superiorid­ad. Pero nada de eso. Primer día de libres, y Hamilton, al frente de las dos sesiones. Y no solo eso, Mercedes hizo doblete en la FP2 dejando a un Ferrari con problemas de set up a 8 décimas. Por eso, Vettel no tardó en cambiar su cara feliz en un rostro serio y tenso antes de realizar unas declaracio­nes a ‘Crash.net’ en las que muestra su nerviosism­o. “El coche es el mismo que en los test pero no se comporta igual. ¿Qué ha pasado con todas esas tonterías sobre que ellos no estaban en forma?”, dijo a la prensa.

“Creo que los Mercedes parecen muy rápidos. No sé si es porque nosotros hemos tenido algunos problemas,

pero el hecho es que parecen estar en su propia liga”, dijo el alemán tras la FP2. Unas declaracio­nes que no parecen esta vez que formen parte de una estrategia para responder con otra sorpresa en clasificac­ión de esta pasada madrugada (7.00). Estarán en la lucha en carrera, pero lo que queda más

claro tras los primeros libres es que los de la estrella van muy rápido. Hamilton dio un mazazo a Vettel para empezar y el germano no paraba de hacerse preguntas. “No lo entendí, para ser honesto. Me ha sorprendid­o un poco. Quizá todo el mundo ha tenido problemas y le podemos dar la vuelta, pero parece

que son muy fuertes, mucho más de lo que dijeron antes de este fin de semana”, añadió Vettel.

Todo tiene una explicació­n. Nos la daba hace días a MD, antes de que todo sucediera, Toni Cuquerella, ex injeniero jefe de Ferrari. “Los tiempos hay que leerlos con mucho, mucho cuidado. Muchas veces, lo mejor es ni mirarlos. La cantidad de tiempo que podemos esconder los coches cuando estamos rodando en un circuito es tan grande que a todos los tiempos habría que ponerle o quitarle casi unos dos segundos. Si al que está delante le sumas dos y al que está detrás le restas otros dos, ves que el orden cambia completame­nte”, argumentab­a.

“Se nos olvidan muy pronto las pretempora­das de años anteriores”. Afirmación muy cierta. Mercedes terminó el pasado año en los test de 2018 con Hamilton 11º y terminó ganando el Mundial. Ahora, quiere volver a golpear desde el inicio, mañana en la primera cita del curso (6.10h/Movistar F1)

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FOTO: GETTY Lewis Hamilton dio un golpe sobre la mesa en las dos primeros libres del año en Australia demostrand­o que su Mercedes, de cara a la carrera de mañana, es muy rápido

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