26/26 eliminatorias
de Semedo, que recogió un gran pase de Messi y asistió a Griezmann en el corazón del área. El francés controló el balón y lo cruzó lejos del alcance de Cuéllar.
El fútbol azulgrana fue dinámico, sobre todo en la primera media hora, y con desmarques en busca de mayor verticalidad. El juego interior, siempreconMessi activo, pretendía abrir huecos por las bandas para Semedo por la derecha y Ansu o Jordi Alba, cuando el joven delantero se metía por dentro, por la izquierda. Una de estas subidas del lateral acabó en centro y gol que fue anulado por supuesto fuera de juego al recibir en el área.
También el juego a balón parado fue un activo que el Barça explotó. Messi buscó repetidamente a Len
El Barça aumentó su fiabilidad en la Copa. No cae en eliminatoria desde la semifinal de 2013 ante el Madrid. glet, incorporado al ataque en faltas y córners. Tras dos intentos en sendas faltas, Messi finalmente encontró al central a la salida de un córner: sacó al primer palo, allí Lenglet peinó hacia atrás y marcó.
El Leganés, por su parte, no viajó de turismo. Nada más empezar, antes de los 30 segundos, había tratado de sorprender a Ter Stegen con un chut de Braithwaite que impactó en el poste por su parte exterior. El conjunto pepinero fue agresivo en la defensa e intentó desplegarse en contragolpes en cuanto conseguía robar el balón, beneficiado en parte por los riesgos que el conjunto azulgrana asumió en la salida. De hecho, en el primer tiempo remató tanto como el Barça, con chuts de Braithwaite, Aitor Ruibal o Roque Mesa. Ter Stegen tuvo que detener uno de Ruibal tras una pérdida de Busquets.
La sentencia
Messi puso el 3-0 cuando el ritmo del partido decaía, en la segunda parte. El Leganés, que pronto empezó a dosificar jugadores, pensaba ya en el partido de Liga del fin de semana y el Barça controlaba completamente. Tenía, tenía y tenía el balón, sin la chispa de la primera parte, cuando De Jong aprovechó un momento en que el Leganés había subido líneas y encontró un espacio entre la defensa por el que mandó un pase espectacular a Messi, que hizo un recorte y remató. El balón dio en Tarín y entró.
Cuando llegaron los cambios, hubo pruebas por parte del Barça. Una de ellas, curiosa: De Jong se puso como extremo derecho, cuando Arthur entró por Griezmann. El brasileño marcó en una jugada en que Cuéllar despejó un chut de Ansu y Awaziem el segundo tiro, de Messi. Al tercer remate fue la vencida y Arthur logró el 4-0. El quinto fue obra de Messi, ya como ‘falso nueve’, tras recoger un gran pase de Rakitic y recortar a Cuéllar
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