Mundo Deportivo (Barcelona)

La trampa de la cantera del Barça

- Xavier Bosch

a desgracia de unos siempre es la suerte de otros” escribía ayer Carles Rexach, el gran filósofo del barcelonis­mo práctico. Todos sabemos que sin las lesiones de Messi, Suárez y Dembélé a principios de temporada, Ansu Fati no hubiera debutado a los 16 años. De la misma manera que sin las graves recaídas de Suárez y Dembélé, Setién no hubiera alineado a Ansu como titular en sus cinco partidos en el banquillo. E, igualmente deducimos que, si ahora se hubiese fichado a Rodrigo, la delantera en el Bernabéu la formarían Messi, Griezmann y Rodrigo. Como dice el refrán, no hay mal que por bien no venga. Ansu es presente del Barça, con mucho futuro y sus ilusiones son las nuestras. Pocas cosas hay tan placentera­s como que ‘un noi’ de la casa se convierta en el jugador carismátic­o de la plantilla. “No hay mal que por bien no venga”, dice el refrán. ¿Se acuerdan de esa rotura del tendón de Aquiles de Koeman en el Calderón? Parecía que se acababa el mundo o, cuando menos el Barça, y Cruyff- Rexach se inventaron a Guardiola, personaje que ha resultado fundamenta­l para la historia de éxito del Barça.

Se habla mucho, a veces demasiado interesada­mente, de los pocos jugadores de la cantera que llegan al primer equipo: las críticas son multidirec­cionales hacia entrenador­es que no arriesgan ( Valverde era uno), hacia las estructura­s de La Masia (que ni fichan a buenos jóvenes ni saben entrenarlo­s para dar el salto), o hacia el presidente de turno que tiene una actitud titubeante o descreída con el fútbol base. Sentado en el derrumbado Miniestadi, pensé muchas veces sobre el proceso de por qué Valdés y Puyol subieron y se quedaron arriba… y otros no. Porque hay muchos años de sequía de nuevos canteranos y ahora van a quedarse Ansu y Riqui y quizás Collado o Araujo…

Del paso de un jugador de la cantera a su consolidac­ión en el primer equipo, tengo una hipótesis. La cantera florece en el primer equipo, básicament­e, en tiempos de crisis del Barça. O dicho de otra manera, cuando el equipo funciona, gana, lidera, triunfa y maravilla, no hay sitio para que entre nadie. Lo que funciona no se toca y, por lo tanto, el canterano que llama a la puerta ve como difícilmen­te se le abre.

Seguro que hay excepcione­s que confirman la regla, pero Valdés debutó en la segunda etapa de Van Gaal, donde las crisis del Barça de Gaspart eran más que semanales y la portería parecía las ramblas con tantos que pasaban por ahí. Busquets y Pedro, por obra de Guardiola, entraron en un equipo que llevaba dos años sin blanca. Ahí estuvo Xavi, incorporad­o porVan Gaal enmomentos tambaleant­es, esperando su momento, tapándose los oídos a los cantos de sirena del Milan, para esperar su momento de relevar a Guardiola. Por el contrario, Thiago Alcántara, ante el tapón que suponía un Xavi que lo jugaba todo en su sitio, optó por irse al Bayern de Munich. Venía año de Mundial en Brasil y necesitaba jugar para que el selecciona­dor se fijase en él. Iniesta, en tiempos de Rijkaard, era siempre el primer reserva, hasta que explotó en el descanso de la final de la Champions de París. Un poco lo que puede llegar a pasar ahora con Riqui Puig, y ojalá que la historia salga la mitad de bien que con Don Andrés.

Cada uno marca su itinerario, pero la dinámica del primer equipo es la que abre y cierra puertas. Esta es la trampa. Cuando todo va bien, no hay sitio para el que sube de casa a no ser que sea un supercrack. Es cuando pintan bastos que, de perdidos al río, se abre el paso para que el talento de casa pueda mostrarse en el Camp Nou. Un canterano a tiempo apacigua los ánimos de los barcelonis­tas. Andamos renqueante­s pero, como mínimo, vemos a algunos de los nuestros

H

 ?? FOTO: MANEL MONTILLA ?? Ansu Fati explotó en el primer equipo favorecido por las lesiones de Messi, Suárez y Dembélé
FOTO: MANEL MONTILLA Ansu Fati explotó en el primer equipo favorecido por las lesiones de Messi, Suárez y Dembélé
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain