Dembélé, Grizi, Ansu, Trincao...
El Barça quiso fichar a Ferran Torres cuando costaba 8 millones. No pudo. No lo intentó por 25 y ahora que vale 100 aspira a firmarle por 35. Sería un fichaje extraordinario... para una zona de ataque superpoblada
Lo que unos llating de Braga, que juega en la misman bloqueo es lo ma posición que Ferran Torres. Exmismo que otros tremo. Seguirá en Portugal hasta identifican como junio y ha costado 31 millones. la desconexión Trincao y Ferran, por el que Barque provoca un çaasumiríapagarunpocomásde apagón en el juego de un Barça inlo invertido en el portugués, son deciso. Una condición que no sólo se refleja en el campo sino también en los despachos. En todos. En los de la directiva y en el de la dirección técnica.
La inseguridad, las dudas, nos sitúan ante una nueva coyuntura de mercado con el interés por Ferran Torres, excelente futbolista del Valencia que acaba de cumplir 20 años y a quien ya intentó firmar hace un par de temporadas cuando su cláusula era de 8 millones. Lo contó en MDJosé Luis Artús. El jugador, sintiendo que no era el momento, eligió quedarse en Mestalla y allí siguió progresando.
Cuando el tope de rescisión subió hasta los 25, el Barça no fue con todo a por él y el precio de la indecisión creció exponencialmente. Ahora vale 100 millones, pero dado que su contrato expira en 2021 y el futbolista y sus agentes no renuevan, la cifra debe rebajarse notablemente a menos que el Valencia asuma que en 2021 Torres pueda irse gratis.
Sea cual sea el precio final, ignoremos ese aspecto. Hablemos de planificación porque lo cierto es que el Barcelona se plantea esa operación, al mejor precio posible, y lo hace apenas un mes despuésde haber firmadopara elaño que viene a Francisco Trincao (20), internacional Sub-21 del Sporindudablemente futbolistas de futuro. Como de futuro es el presente de Ansu Fati (17), un chico hecho en La Masia, que sale al campo sin ningún complejo y que ha jugado en todas las competiciones con el primer equipo. Y en todas las posiciones de ataque, pero preferentemente en banda. En banda, como Trincao y Ferran.
Ocurre, sin embargo, que el gran fichaje para los carriles no debería ser nadie de fuera, sino uno que ya está, Ousmane Dembélé. Un encarador nato, un delantero desequilibrante que ha perdido otro año por culpa de las lesiones y que, se supone, estará listo en verano para confirmarse como el refuerzo de lujo que no hemos tenido ocasión de ver por más que estemos hablando de un jugador de 125 millones. Un crack que ha pasado más tiempo en la enfermería que en el campo. Siendo así y si todo fuera como está previsto, ya serían cuatro en esas demarcaciones y cuatro muy jóvenes: Dembélé, Ansu, Trincao y Ferran, pero... ¿Y Griezmann?
El francés, otro dineral destinado a pegarse a una banda en cuanto se recupere Suárez y llegue otro ‘9’ de superlujo ( Lautaro/Werner) completaría un quinteto que no cabe en el equipo, y que resultaría difícil verlo completo en una convocatoria. Alguno de ellos, si llega Ferran Torres, tendrá que salir y Ferran Torres, sinceramente, sería un refuerzo excepcional. Un jugador con experiencia y nivel demostrado para acabar siendo una estrella. Un talento al que el Real Madrid, empeñado en fichar extremos brasileños, no está contemplando a pesar de que el valencianista le saldría incluso más barato que lo que le acabarán costando Vinicius, Rodrigo y compañía ( Reinier).
El problema del Barça es otro. Nofirmó a Ferranen su día y ahora tiene a Dembélé, Ansu, Griezmann y Trincao. Y si le quiere tendrá que moverse rápido. Juve, City, Arsenal y otros le quieren
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