Socio del Barça desde hace dos décadas
n Pocas veces un fichaje ha concitado tanta unanimidad. El anunció ayer por parte del Barça del acuerdo con Sarunas Jasikevicius como entrenador del equipo por las próximas tres temporadas fue recibido por los aficionados azulgrana con una ilusión impresionante, como si todos los astros se alinearan, como si fuese el movimiento natural del hijo pródigo que regresa a su hogar. Saras vuelve, a sus 44 años, al Palau convertido en un entrenador de alto nivel que está llamado a convertirse en un nuevo ‘Zeljko Obradovic’, es decir, un ganador perenne.
A su disposición tendrá una plantilla que está entre lo mejorcito de Europa, con una gran estrella como Nikola Mirotic como gran referente, rodeado de excelentes jugadores que están en un momento de sus carreras en el que tienen experiencia, pero aún no han ganado títulos de forma regular y consistente. Y, realmente, esta plantilla tiene mimbres para marcar época, de eso hay muy pocas dudas. Jasikevicius ha sido señalado para liderar todo eso.
Ayer, en un vídeo difundido por
Jasikevicius nunca ha ocultado su pasión por el Barça y por acudir al Camp Nou a ver los partidos del equipo de fútbol. De hecho, poco después de llegar al club –en el año 2000– se hizo socio y compró dos abonos. Después de su salida del Barça decidió no darse de baja como socio y ha mantenido los abonos en estas últimas dos décadas
Hel club en sus medios y redes sociales, Jasikevicius aseguraba estar “muy ilusionados por este nuevo capítulo en nuestras carreras, muy contentos por volver a Barcelona y esperamos vernos en el Palau. Muchísimas gracias. Visca el Barça y visca Catalunya”.
Su contrato es por tres años, un acuerdo largo que significa que el Barça confía plenamente en él. Y realmente es así. Saras era el plan A, B y C del club, no había ninguna otra alternativa válida. De hecho, es muy posible que alguien pueda pensar que debería haber aterrizado antes en Barcelona. En ese