Fin de ciclo

e utiliza esta expresión cuando una generación de futbolistas victoriosos pierde nivel competitivo y deja de ganar. El entorno azulgrana es tan nocivo que quiere hacer ver que el Barça lleva años inmerso en una gran crisis deportiva sin ganar nada cuando resulta que es el club del mundo que más títulos ha levantado en los últimos 12 años: 29 (2,4 de media y 3 Champions incluidas), por 19 del Madrid. Es evidente que los trompazos en Europa evidencia que esta generación de jugadores se está apagando pese a que no ha dejado de ganar. Llevan 8 ligas conquistadas, que solo se valoran cuando las ganan otros, de las últimas 11, y aún están a tiempo de evitar el año en blanco. Se merecen que no les enterremos antes de tiempo. Es evidente que los buenos se han hecho mayores y los jóvenes no son suficientemente buenos. O los técnicos no se atreven a ponerlos. Hay liga y queda una Champions express. El Madrid ha ganado la mayoría de copas de Europa habiendo hecho peores ligas que la que está completando el Barça. La diferencia es que el entorno blanco se une para maquillar campañas horrorosas gracias a su gen competitivo, algo de suerte y muchas ayudas arbitrales. En cambio, el entorno culé, incapaz de esperar a los comicios, prioriza sus intereses electorales silenciando los perjuicios arbitrales sufridos y deseando el fin de ciclo. Hasta utilizan a Messi para dibujar un escenario tenebroso cuando tiene contrato hasta los 34 años. Ignoran que es tan culé que seguirá en el Barça hasta que se dé cuenta de que ya no está a su máximo nivel, sea quien sea el presidente

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