Empieza el baile

olía decir Cruyff, crítico con el formato de la Champions, que la competición de verdad no empezaba hasta cuartos. Para Johan todo lo demás era puro negocio, afán recaudador de la UEFA para llenar de dinero de los clubs, a cambio de que estos dejasen en el olvido el ambicioso proyecto de una Liga europea. El holandés entendía que con las cribas correspondientes a esta ronda accedían la aristocracia del fútbol, que se enfrentaban en eliminatorias titánicas, de cuartos y semis, hasta llegar a la final para proclamar al campeón.

En esta edición del 2020, la del post confinamiento por el Covid 19, a Johan le sorprendería que de los ocho equipos clasificados solamente dos han sido campeones, Barça y Bayern, ambos en cinco ocasiones, y que en Lisboa jugarán entre ellos. Con un formato relámpago de eliminatorias a partido único, el pronóstico esta más abierto que nunca. Por su excepcional estado de forma los bávaros parecen estar un escalón más arriba que los demás, pero existe el pensamiento que él que salga ganador del duelo contra el Barça de Messi será el máximo favorito para “campeonar”, con el permiso de City, PSG y Atlético de Madrid.

Mientras Leipzig, O. Lyon y Atalanta ejercen de intrusos en una ronda eliminatoria en que tienen más a ganar que a perder, aunque tal como han quedado sus emparejamientos, pocas esperanzas puedan albergar

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