Mundo Deportivo (Barcelona)

“A veces me pregunto por qué soy tan frío. El único día que no fui capaz sin llorar fue al decirlo a nuestros hijos”

-

visibilida­d a la ELA y encontrar la forma de dar sentido a mi vida. Y lo estoy encontrand­o de forma más satisfacto­ria incluso que estos años atrás en el fútbol a través de tener la sensación de que estoy intentando ayudar a todos estos compañeros de mi nuevo equipo.

Es como entrenar un vestuario de 4.000 pacientes en España aunque sabe que el partido se perderá a corto plazo pero intentando ganarlo a la larga.

Así es, nunca había tenido un equipo tan grande. Mi intención es hacer el partido lo más largo posible. Con una buena mentalidad, puedo ayudar a que así sea. Y en ese partido largo, vamos a ver si hay un momento de gloria y aparece ese gol fantástico que te da el título y aparece esa cura fantástica. Mi sensación es que no soy muy optimista de que voy a poder aprovechar­me de esa cura, pero en el sentido de la vida, mi objetivo es que me tiene que quedar haber hecho todo lo posible para que la cura llegue cuanto antes.

De las llamadas que ha recibido, ¿cuáles le han hecho más ilusión? Pues las de unos 35 o 40 de compañeros de mi nuevo equipo. Estás conectando con alguien en dificultad­es. Que les haya gustado lo que has dicho, que se han sentido reflejados o un gracias eso no se paga con dinero. Me ha dado una satisfacci­ón interna mayor. Como detalles de clubs donde estuve como Celta, Osasuna, Racing, Barça e incluso como Madrid y Valencia el día posterior a la rueda de prensa con la camiseta. Sentí una satisfacci­ón colectiva por lo que en un momento dado puede aportar el deporte a la sociedad. Emociona con su mensaje. ¿Tiene momentos de bajón o de llorar?

A veces me pregunto por qué soy tan frío. No me emociono desde las lágrimas y es curioso porque sí me pasa a veces viendo una película. Pero estos meses he sido frío. No sé si es bueno o malo pero es lo que siento y lo que transmito. No digo que llorar sea malo sino que es un beneficio poder soltar y aliviarte. El único día que no fui capaz de aguantar fue cuando se lo dijimos a nuestros hijos. Fue el día más emotivo de estos meses y hace un año y pico de eso. Verles a ellos impactados, aunque sabían que a su padre le pasaba algo grave, no sabían qué era. Y explicar las consecuenc­ias con claridad y sin tapujos lo que es esta enfermedad llevó a unos minutos de muchísima emoción. Y no tengo claro por qué no me emociono tanto pero una cosa es lo que exterioric­e y otra es la sensación interna. Y eso es muy grato

H

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain