Haaland apaga la llama del sueño
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SEVILLA
B. DORTMUND n El Sevilla recibió un duro mazazo de cara a sus aspiraciones en la Champions al encontrarse con un Haaland estelar y un Borussia Dortmundo que logró sorprender con un 2-3 a los de Lopetegui en su campo pese a que los locales se adelantaron muy pronto con un gol de Suso.
El Sevilla, con Jesús Navas de
LAS FRASES Julen Lopetegui “El resultado no es bueno. Perder en casa nunca es positivo, pero queda un partido y nos vamos a agarrar a esa posibilidad”
“Hemos merecido el empate, algún gol más. En la primera parte nos han castigado cada vez que han llegado”
Edin Terzik “Definitivamente fue uno de nuestros mejores partidos de esta temporada”
“Estamos contentos con el resultado y orgullosos de haber ganado a este equipo”
vuelta en un once en el que echaba en falta la potencia de Ocampos, se las prometía muy felices con el arranque soñado, cuando Suso agarró un balón en la frontal del área y lanzó un zurdazo que, tras dar en un defensa, sorprendió al meta Hitz. La ocasión era histórica para el Sevilla, que busca su tercera presencia en cuartos de su historia, pero a raíz de ahí el equipo alemán se sacudía todas las dudas que tiene en la Bundesliga y que habían motivado que se discutiera su condición de favorito en la eliminatoria para hacer daño de verdad a la contra con la figura de Haaland agrandándose en cada arrancada. El gigante noruego fabricó el primer gol y anotó los dos siguientes para dejar helado el Sánchez Pizjuán a la hora del descanso.
Primero protegió un balón en la banda para llevárselo al borde del área y ahí poner de cara a Dahoud para el zapatazo de éste. El Dortmund había empatado antes de los 20 minutos y a los 27 ya mandaba en el marcador con una espectacular galopada del nórdico y la pared con Sancho.
El Sevilla estaba roto y las incorporaciones arriba de Fernando para sumar un efectivo más al ataque las seguiría pagando bastante caro con el tercer tanto, en una pérdida de Rakitic y el Papu que acabó con otro acelerón de Haaland a dos minutos del descanso.
Lopetegui se veía obligado a mover cosas para levantar aquello y optó por cortar la sangría con Gudelj en el campo y cambiando de sistema, anclando ya a Fernando en una defensa de tres centrales para frenar a Haaland como fuera.
Después, puso en el campo más arsenal con De Jong, Munir, y la pausa de Óliver Torres y Óscar Rodríguez, teniendo éste la ocasión de acortar distancias con su especialidad, el lanzamiento de falta. Tiró una al poste (74’) y con ello movió a la fe de los suyos, pero la empresa era difícil. Del tiralíneas del talaverano a balón parado también salió otro gol, el segundo, de De Jong, pero ya no daría para más.
El Sevilla, que detuvo su racha triunfal (9 victorias) y la imbatibilidad de Bono en 730 minutos, tendrá que levantar un resultado difícil en Iduna Park, donde deberá ganar por dos goles de diferencia
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