Pues sí, hay opción a título
Seguiros vacunando... cuando os llamen y os toque. A mí aún no me han puesto la vacuna. Pero tengo familiares y amigos que están encantados. Tenemos que cuidarnos, seguir con la precaución y esperar mejores tiempos que seguro que van a llegar. Ánimos y adelante.
Hace un par de meses escuché a unos amigos dar por finalizada esta Liga. Era cuando el Atlético de Madrid nos llevaba no sé cuantos puntos y faltaban partidos por jugar. En aquel momento, recuerdo que me salió del alma decir “no he vivido en mis 70 Ligas presenciadas ni una de ellas que se ganase o perdiese en diciembre; tampoco esta”. Y es verdad que uno de los ganchos del fútbol es que pasan las cosas más sorprendentes.
El jueves pasado se jugaba la última fecha del Brasileirao. Flamengo había perdido en campo del Sao Paulo y llevaba dos puntos de ventaja al Internacional de Porto Alegre. El partido de estos contra Corinthians se alargó ocho minutos y en el último los de Porto Alegre marcaron un gol. Alegría, saltos, cohetes... impresionante. A los pocos segundos, el árbitro se pone la mano en la oreja y parece que recibe una llamada de los del VAR. Se pasan varios minutos, que si que no, y al final anulan el gol: campeón, Flamengo, Lágrimas en Internacional. No digo que esto vaya a pasar aquí, pero en un campeonato tan extraño, con Champions, Copa del Rey y partidos sin público y faltando aún muchos puntos, todo es posible. El Barça, el sábado, mostró una cara totalmente distinta a la de las últimas fechas, en especial los lamentables partidos frente a Cádiz y Elche. Los técnicos encabezados por Koeman tomaron una decisión táctica básica. Hay que cerrar espacios y evitar que el balón llegue a nuestra área con posibilidades de gol para el contrario. Puso cinco defensas, con dos por las bandas de llegada fácil al campo contrario. Tres centrocampistas, más Messi, para controlar la zona ancha y un punta rápido sin posición fija en ataque par evitar marcajes estrechos del rival. Todo esto habría servido de poco, a pesar del acierto, si la actitud y disposición de los nuestros no hubiese alcanzado un alto nivel. Con estos espacios en ataque, un descuido local lo aprovechó con sabiduría y calidad Messi para hacer un pase impecable a Dembélé que, con velocidad, se plantó en el área contraria y prácticamente decidió el partido. Este gol desconcertó totalmente a los locales, que estuvieron a merced del Barça. Es el primer paso de una reacción que se espera ya para el próximo miércoles cumplirla y poder dar la vuelta a este marcador contrario de 2-0. Será interesante ver el sistema táctico de unos y otros, porque en el próximo partido vale aquello del gol en campo contrario y esto puede hacer pensar muchoa Ronald y a Julen. Por esto sí que hay Liga... y también Copa. Adelante
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